NACE UN NUEVO PRODUCTO FINANCIERO
Ante la previsión de una carestía futura, el agua ha comenzado a cotizar en el mercado de futuros de materias primas de Wall Street
ElEl agua es una sustancia cuya molécula está formada por dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno. Se trata de un elemento indispensable para vida, que cubre tres cuartas partes de la superficie de la corteza terrestre. Se estima que aproximadamente el 70% del agua dulce se destina a la agricultura, el 20% es absorbido por la industria y el 10% restante se destina a consumo doméstico (aunque, según datos de la ONU, 2.200 millones de personas no disponen de agua potable). Su uso global se ha multiplicado por seis en los últimos cien años, según recoge el Informe Mundial de Naciones Unidas sobre Desarrollo de los Recursos Hídricos 2020 Agua y Cambio Climático, y la previsión es que lo hará más en el futuro. El crecimiento demográfico y econóyamos unido a los efectos del cambio climático, que provoca y provocará periodos de sequía, aumentará previsiblemente, según los expertos, la demanda del líquido elemento.
Así, el agua se ha convertido en un bien escaso y, también preciado, algo que no ha pasado desapercibido para el mercado. Prueba de ello es que, desde el pasado mes de diciembre, el agua cotiza en el mercado de futuros de materias primas de Wall Street, uniéndose así a petróleo, el oro, y a otros productos agrícolas como trigo, cacao, soja e, incluso, zumo de naranja.
Estos futuros replican a un índice creado en 2018, el Nasdaq Veles California Water Index (NQH2O), surgido de la asociación de Nasdaq Veles Water y WestWater Research. El precio de este índice a su vez viene determinado por el precio de los derechos de compra sobre el agua en los cinco principales mercados de California: Central Basin, Chino Basin, Main San Gabriel Basin, The Mojave Basin and California’s Surface Water Market.
La principal razón de que salga al mercado bursátil este nuevo «commoditie» es la idea cada vez más plausible de que en un futuro no muy lejano va a existir un problema más generalizado por escasez de agua, «lo que no significa, para nada, que no vamico, a tener agua», precisa Fernando Romero, analista de Ábaco Capital.
Actualmente, el NQH20 cotiza ligeramente por encima de los 500 dólares por «acre-pie», una medida que equivale a 1.233,48 metros cúbicos. A diferencia de otros futuros, como puede ser el barril de petróleo, en los que se efectúa una entrega física al vencimiento, en el caso del agua lo que se adquieren son derechos sobre su consumo.
Su objetivo es proporcionar a agricultores, ganaderos y grandes consumidores de agua un precio de referencia asegurado a futuro sobre el que hacer sus previsiones. «El hecho de que el agua cotice otorga un nivel de transparencia elevado que puede permitir a los inversores realizar sus cálculos de negocio pudiendo monetizar una variable hasta ahora no cotizada y, por tanto, incrementa las posibilidades de negocio», explica Javier Urones, Head of Sales de XTB. Una herramienta útil que va a permitir a los agricultores californianos cubrir sus gastos derivados del riego de sus cosechas y tener una mayor visibilidad en su estructura de costes.
Y es que las actuales condicio
El índice NQH20 recoge derechos sobre consumo futuro y proporciona a los agricultores y ganaderos de California un precio de referencia para hacer sus previsiones de negocio
climáticas hacen prever precipitaciones irregulares en regiones como California, el principal mercado agrícola de Estados Unidos, por lo que puede haber mucha volatilidad en el precio del agua. «Para que no haya fluctuaciones a la hora de establecer el valor de las cosechas, los agricultores pueden de esta manera ser capaces de fijar sus costes y hacer así previsiones más estables. En California, donde los cultivos de almendras y frutos secos precisan mucho riego, estos futuros serán muy beneficiosos, ya que les permitirá decidir sobre futuras inversiones», indica Romero.
Se trata, pues, de una apuesta muy novedosa, ya que, tal y como asegura Urones, jamás se había puesto precio a una materia prima tan necesaria para la vida. No obstante, precisa que este valor hace referencia a una zona concreta, y no a un valor global de la misma. «Hay indicar que este futuro marca el precio del agua en una zona determinada –en este caso California–, y que, por supuesto, diferirá en gran medida frente al precio que podría obtener en otros sitios (pensemos en un lugar muy lluvioso o en mitad de un desierto, cada ubicación es distinta)», señala.
Polémica
No es de extrañar que el hecho de poner precio a un elemento esencial para la vida haya suscitado controversia, ya que, en opinión de algunos expertos, puede abrir la puerta a especular con este elemento tan indispensable. «Qué será lo próximo, el oxígeno», se lamentan. Pero el fenómeno podría extenderse.
«Entiendo que exista un debate ético sobre si se debería o no poner precio al negocio del agua, pero pensemos que eso ya está sucediendo actualmente, con las licennes cias de abastecimiento de ciudades o la explotación de acuíferos. Es innegable que cotizar un activo que no lo hacía va a aumentar las operaciones y, por tanto, la especulación sobre el mismo, pero, precisamente, un instrumento se vuelve menos especulativo en el momento en el que pasa a ser muy popular y tiene mucha liquidez y número de inversores. Si un mercado carece de liquidez y de participantes, se vuelve mucho más fácil de manipular», explica Urones.
Romero considera que, a pesar de la polémica promovida por este nuevo «commoditie» negociable en el mercado, no quiere decir que se le haya decidido poner un precio al agua, «ni mucho menos». Agricultores y otros empresarios, cuyas industrias necesitan un importante uso de agua, ya pagaban cuantiosas sumas de dinero por el uso de la misma. La única diferencia es que ahora estos van a poder cubrirse frente a posible subidas.
Pero no solo el agua como instrumento financiero suscita interés entre los agricultores, también los inversores han visto negocio. Hedge funds y fondos de inversión especulan con esta materia prima. «Si el agua ha comenzado a cotizar es porque hay demanda. Cada vez más fondos invierten en este elemento o empresas relacionadas. Es un mercado, sin duda, al alza, sobre todo por la previsión de que dentro de 10 o 20 años la demanda de este recurso limitado se va a disparar», afirma Romero.
Así, son ya varios los fondos de inversión que incluyen en su portfolio activos relacionados con la agricultura y el agua, como Panda Agriculture & Water Fund. Se trata del primer fondo que incluye incluye el agua entre sus inversiones.
Pictet lanzó hace 21 años Pictet Water, fondo pionero de inversión temática global basada en megatendencias, como crecimiento demográfico y económico, desarrollo tecnológico, infraestructuras o la salud. En este caso, tal y como explica Cédric Lecamp, gestor de Pictet Water, no se trata de invertir en agua como materia prima, sino en empresas que proporcionan agua residencial, industrial y para la agricultura en el momento, calidad, cantidad y calidad precisas. «La facturación mundial agregada de estas industrias es similar a la de la farmacéutica, 700.000 millones de dólares y muestra crecimiento estable, en torno al 6% anual. De hecho, el precio del agua crece con el IPC de manera estable. Así, mientras que la volatilidad del petróleo de 1989 a 2016 fue del 40%, la del agua de sólo 4%, habiendo aumentado proporcionalmente más, siendo una inversión relativamente anticíclica», asegura.
Más de la mitad de la población vive en zonas con estrés hídrico. La OCDE estima que para 2030 habrá que invertir un billón de dólares anualmente, frente a 600.000 millones actuales, para garantizar el acceso universal y saneamiento adecuado. Cada dólar invertido en infraestructura de agua potable y residual proporciona 6,35 dólares de crecimiento del PIB de largo plazo y 2,62 a otras industrias, según cálculos de Naciones Unidas.
Por su parte, la consultora McKinsey estima que el mercado de las infraestructuras y mejoras en la gestión del agua ascenderá a 6,8 billones de euros, pero la OCDE lo eleva hasta más de 13 billones. Un negocio que cada vez despierta más interés entre los inversores.