El Govern baraja relajar la movilidad a partir del lunes
Planea levantar el cierre comarcal tras la estabilización de la pandemia. Salud pide prudencia y decidirá en las próximas horas
Cataluña vive confinada y con la movilidad restringida prácticamente desde octubre del año pasado, cuando se impusieron el cierre perimetral y el toque de queda a las 22:00 horas. Salvo en contadas excepciones –Navidad o Semana Santa– las restricciones apenas han variado y el confinamiento tan sólo ha cambiado de municipal a comarcal, un avance mínimo en zonas como Barcelona o el área metropolitana. Ahora, con una tercera ola estabilizada y una cuarta que no acaba de golpear, la Generalitat plantea levantar el cierre comarcal el próximo lunes y estudia nuevas formas de movilidad con regiones más amplias o incluso con mantener sólo el cierre perimetral. La decisión se tomará en las próximas horas.
La portavoz del Ejecutivo, Meritxell Budó, aseguró ayer en rueda de prensa que se estudia cierta reapertura «si los datos epidemiológicos acompañan». El debate sobre la movilidad lleva encima de la mesa del Govern desde hace varias semanas: el Ejecutivo ha barajado abrir las comarcas y confinar por veguerías o regiones sanitarias. Ambas fórmulas abarcan áreas más amplias que las comarcas y permitirían destensar zonas especialmente dende sas de población como la ciudad de Barcelona.
Sin embargo, y pese a que algunos medios adelantaron la noticia ayer, la portavoz Budó llamó a la prudencia, pidió estudiar los datos, debatir las medidas y acabar acabar de decidir en el marco del Procicat –el comité técnico que gestiona la pandemia– en las próximas horas. «Si las cosas van bien estamos analizando la posibilidad de ampliar el confinamiento comarcal. Todavía no hemos empezado. La reunión será mañana y el jueves o viernes se hará público. La voluntad está, pero todavía no tenemos ningún resultado», confirmó en una entrevista en Rac1 el secretario de Salud Pública, Josep Maria Argimon, por la mañana.
La titular de Salud, Alba Vergés, fue incluso más allá y pidió «no especular» con las medidas para combatir el coronavirus, ante un eventual levantamiento del confinamiento comarcal. En declaraciones a los periodistas tras visitar el edificio polivalente del Hospital Moisès Broggi de Sant Joan Despí, explicó que siempre se revisan las medidas y que «se explicará cuando esté decidido». «No está decidido, si estuviera decidido se explicaría», añadió la consellera, quien recordó que las UCI continúan muy llenas pese a la estabilización de casos y reclamó reducir las interacciones de riesgo.
En cuanto a los pacientes ingresados actualmente, la cifra se sitúa en 1.670, 47 menos que en el último recuento. Un total de 499 pacientes se encuentran ingresados en unidades de cuidados intensivos (UCI) de centros públicos y privados, siete menos que en el balance anterior. La velocidad de reproducción de la enfermedad (rt) baja hasta 1,07 –100 contagian a 107 personas– y la tasa del riesgo de rebrote del coronavirus ha caído y se sitúa de nuevo por debajo de los 300 puntos.
Estado de alarma
La portavoz del Govern pidió también herramientas para poder seguir gestionando la pandemia cuando se levante el estado de alarma, previsiblemente el 9 de mayo, y ha apostado por reformar la Ley de Salud Pública estatal, para que «se adapte el marco normativo que permita la gestión de la pandemia sin tener que utilizar herramientas tan excepcionales como el estado de alarma». «Lo que necesita el Govern es disponer de los recursos legales necesarios para poder hacer frente a la pandemia», agregó Budó, quien recordó que, sin el paraguas del estado de alarma, las decisiones que tome la Generalitat de restricciones para controlar la pandemia requerirán de autorización judicial.