España tardará un año más que Europa en recuperarse
Bruselas vaticina la peor tasa de paro de la UE junto a Grecia
La llegada del maná europeo a través del fondo de recuperación conseguirá ir apuntalando la recuperación de la economía española y convertir a nuestro país en el que más crecerá durante 2021 y 2022, después de haber experimentado una caída récord del 10,8% en 2020 y un 0,5% adicional en el primer trimestre del año. Según las previsiones de primavera publicadas ayer, España crecerá este año un 5,9% y un 6,8% el que viene. Una mejora respecto a los antiguos vaticinios del Bruselas publicados en el mes de febrero, que vaticinaban una escalada del PIB del 5,6% este año y un 5,3% el próximo. Pese a ello, el PIB español no llegará a recuperar el terreno perdido por la crisis del coronavirus hasta finales del año que viene, un año más tarde que el resto de las grandes economías de la zona euro.
Las previsiones de la Comisión Europa son más prudentes que las manejadas por el Gobierno, ya que Bruselas considera que el impacto del plan de recuperación empezará a notarse sobre todo a partir del año 2022. Sin embargo, el Ministerio de Economía cree que el PIB de nuestro país escalará hasta el 6,5% este año y el 7% en 2022, casi un punto por debajo de la optimista previsión del Gobierno este año y casi dos el que viene. «Si los fondos se aplican de forma eficaz, el impacto económico será significativo, particularmente en 2022», reza el texto desvelado hoy. Pero la baja ejecución de los fondos comunitarios es una de las debilidades de la economía española y de ahí las dudas de la Comisión Europea sobre la velocidad de la recuperación. Según los cálculos de Bruselas, nuestro país será capaz de gastar 12.000 millones de euros este año y 22.000 el que viene.
A pesar de estos buenos resultados, el empleo –uno de los tradicionales talones de Aquiles de la economía española– tardará en recuperarse. Bruselas vaticina para este año un tasa de paro del 15,7% lo que supone un ligero empeoramiento de dos décimas respecto al año pasado. En 2022, la tasa de desempleo será del 14,4%, la segunda cifra más alta de los Veintisiete tan sólo por detrás de Grecia, con un 16,1%.
Como ya hizo en su informe anterior, Bruselas ha vuelto a alertar del riesgo de quiebras en las empresas, lo que también tendrá un impacto en el paro.
Estos pobres resultados en el empleo en el corto plazo se deben a las diferentes velocidades de la recuperación según los sectores y la alta dependencia de nuestra economía de negocios que implican una gran interacción social, como hostelería y turismo. Bruselas, que reconoce que estas previsiones están sujetas a la incertidumbre de la pandemia, señala que España genera dudas al depender especialmente del turismo y por el posible estancamiento a la hora de la implementación del plan de recuperación.
En cuanto a las cifras de déficit público, seguirán lejos del 3% que marcan las leyes comunitarias, pero las cuentas públicas españolas se beneficiarán del robusto crecimiento económico. Nuestro país experimentará una sustancial reducción del déficit público de más de la mitad en dos años (del 11% de este año al 7,6% y hasta el 5,2% el que viene). La deuda pública bajará progresivamente y a finales del año que viene llegará al 116,9% del PIB después de alcanzar el 120% del PIB el año pasado.