«¿CÓMO VOY A DECIR AHORA QUE ME VOY?»
ZIDANE NIEGA QUE HAYA COMUNICADO SU DECISIÓN A LA PLANTILLA
ElEl Real Madrid estuvo a punto de llegar a la última jornada como líder. El Atlético lo evitó en el último minuto, pero tendrá que ganar el partido que le queda para ser campeón. Y es que en eso se ha empeñado el Madrid, en pelear hasta el final y no perder la fe hasta que no haya más remedio. La culpa de que los blancos sean ya los únicos que pueden quitarle el título a los de Simeone la tiene la racha de diecisiete encuentros sin perder que acumula el Real Madrid en Liga. Desde aquella derrota ante el Levante del 30 de enero no caen los de Zidane, algo de lo que se felicita el técnico francés. «Sabíamos que se iba a decidir en el último minuto y es lo que va a pasar. Tenemos que seguir sumando, como hoy (por ayer) en un partido difícil. Los jugadores creen en ganar esta Liga y lo vamos a intentar hasta el último minuto, estoy feliz por ellos», decía Zizou, que desmintió la teoría de que ya les ha comunicado a sus futbolistas que el próximo curso no estará en el banquillo. «¿Cómo voy a decir que me voy ahora? Es mentira. Me concentro sólo en lo que queda de temporada. Sólo me importa eso, lo que nos estamos jugando. Me gustaría que no se hablase tanto de mi futuro, porque no es lo importante. Ya se verá».
Nacho, goleador en San Mamés, también admitió que no les ha comentado nada en ninguna charla. El Madrid siempre gana cuando marca el canterano, que una vez más parecía un actor secundario y ya es uno de los centrales que más juega. «Dicen que no hace ruido, pero hace mucho con sus actuaciones en el campo. Lo da todo y se merece estar aquí», decía Zizou, cansado, pero feliz por seguir en la pelea.
Otra vez hubo una mano en el área rival que el colegiado, en este caso Mateu Lahoz, no vio como penalti. Los futbolistas blancos que estaban más cerca de Morcillo lo vieron clarísimo y Zidane no quiso esta vez entrar tan a fondo como la semana pasada. «No voy a hablar de eso otra vez. Mis jugadores vieron mano, el árbitro está ahí y para él no había nada».
El Madrid perdió dos Ligas consecutivas en Tenerife llegando a la última jornada dependiendo de sí mismo, y Zidane espera que el fútbol le devuelva una de ésas el próximo domingo. Necesita ganar al Villarreal y que no haga lo mismo el Atlético ante el Valladolid. El técnico francés es por naturaleza optimista y se le escapó una sonrisa al pensar en esa posibilidad. «Ojalá la ganemos en el último minuto. A pesar de tener muchas dificultades esta temporada estamos en la pelea», insistía Zizou, feliz de que su vestuario esté todavía de pie cuando muchos daban el curso por terminado tras aquella derrota que dio paso al famoso enfado del entrenador.
Aquel día pidió tiempo y crédito para sus futbolistas, que desde entonces sólo han perdido contra el Chelsea. Con el Barcelona ya desahuciado, el Madrid se mantiene en pie a pesar del cansancio y de los kilómetros en las piernas de jugadores como Modric. El croata era el más veterano con diferencia sobre el césped de San Mamés y volvió a ser de los mejores. Sin Kroos, aislado por el contacto con un positivo, Luka es toda la materia gris del centro del campo. Y no se cansa. «Está de puta madre. Es increíble lo que hace con el balón, nunca lo pierde».
«Mis jugadores vieron mano, pero el árbitro está ahí y no pitó. No voy a decir nada» «Me gustaría que se hablase menos de mi futuro. No es lo importante. Ya se verá»