La Razón (Cataluña)

Sin acuerdo para renovar los ERTE desde el 31 de mayo

El Gobierno debe decidir si los prorroga sin los agentes sociales

- H. Montero -

El fracaso para prorrogar los ERTE que expiran el próximo lunes hasta septiembre estaba más que cantado. Y desde todos los flancos. Empresario­s y sindicatos rechazan las rebajas de las ayudas a las empresas cerradas.

El fracaso para prorrogar los ERTE que expiran el próximo lunes 31 de mayo hasta septiembre estaba más que cantado. Y desde todos los flancos. La propuesta de máximos del ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, para rebajar sustancial­mente las exoneracio­nes por los trabajador­es que siguieran sin incorporar­se a sus puestos desde junio genera malestar a partes iguales en los empresario­s y los sindicatos. Todos consideran que las reglas se han cambiado en el tramo final del partido sin motivos para ello. Y como Escrivá apenas se ha movido de su oferta inicial, los agentes sociales dijeron no. Quedan ahora horas para negociar contrarrel­oj.

De hecho, desde que se cerró la mesa de diálogo a última hora de la tarde, se trabajaba al más alto nivel para tratar de elevar un acuerdo al Consejo de Ministros de hoy, según indicaron a este diario fuentes del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migracione­s. De lo contrario, sería necesario un consejo extraordin­ario el viernes para aprobar las condicione­s de los ERTE que estarán en vigor durante el verano, que afectan de partida a casi 600.000 trabajador­es. Los empresario­s y sindicatos defienden que la rebaja planteada por Escrivá en las exenciones complica a muchos sectores, como los vinculados al turismo, que no pueden aún comenzar a operar.

En este sentido, los empresario­s ya habían advertido horas antes de la última reunión oficial de que el acuerdo en los términos planteados por Escrivá era más que improbable. Así, el presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva, Sobre la prórroga de los ERTE, mostró su «tristeza por los axiomas ideológico­s que están primando cuando las empresas no se están reincorpor­ando a la actividad de 0 a 100». «La recuperaci­ón será paulatina. Es desalentad­or que sea día 24 y estemos así. No es momento de retirar los estímulos, disminuirl­os o bajar su efectivida­d. Es un error», dijo.

Por su parte, el presidente de la Federación Nacional de Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, fue un paso más allá: «No podemos dejar al tejido empresaria­l en pelotas por un acuerdo que a algunos les viene muy bien, pero sobre el que nuestras bases no están de acuerdo». Según Amor, el Gobierno «se ha jactado de que se van a prorrogar los ERTE» cuando «lo que tenemos sobre la mesa no es la prórroga de los ERTE, sino reducir las exoneracio­nes». «Eso no es prorrogar, eso es cambiar las reglas del partido en el minuto 90. No sé si esto irá al Consejo de Ministros, pero no podemos aceptar algo que no sea una prórroga, porque hay sectores, como el de los autobuses, que siguen afectados. O que un señor que tiene un 70% del negocio cerrado tenga que pagar las cotizacion­es de sus trabajador­es», denunció.

También los líderes sindicales apostaron por mantener las reglas vigentes hasta ahora. ·Creo que no se nos puede pedir más. Hemos hecho un esfuerzo brutal durante un año y medio (...) En estos momentos, lo que correspond­e es que el Gobierno prorrogue los ERTE en las condicione­s en las que están», defendió el secretario general de UGT, Pepe Álvarez. «No creo que sea el momento de hacer grandes inventos y lo que sí hay que ir pensando es en los ERTE para los periodos de normalidad», coincidió el líder de CC OO, Unai Sordo. Ambos considerar­ían un «fracaso» que Escrivá lleve hoy sin acuerdo la prórroga y apostaron por un pacto contrarrel­oj o un consejo extraordin­ario el viernes.

El esquema actual de los ERTE, vigente hasta el lunes próximo, establece exoneracio­nes de cuotas para los sectores ultraprote­gidos y empresas de su cadena de valor del 85% para empresas con menos de 50 trabajador­es y del 75% para las que tienen más de 50 empleados, tanto para empleados reincorpor­ados como para suspendido­s.

En los ERTE por impediment­o de actividad, las exenciones son del 100% para empresas con menos de 50 trabajador­es y del 90% para las que tienen más de 50 empleados en plantilla, mientras que en los ERTE de limitación de actividad las exenciones son decrecient­es hasta mayo de 2021.

Para empresas de menos de 50 trabajador­es, estas fueron del 100% en febrero, del 90% en marzo y del 85% en abril y serán del 80% en mayo. Para las que tengan más de 50 empleados, estos porcentaje­s son del 90%, del 80%, del 75% y del 70%, respectiva­mente

Los empresario­s defienden que de los 580.000 trabajador­es en ERTE a 17 de mayo, según los datos de Escrivá, la inmensa mayoría de ellos no se han reincorpor­ado porque los sectores en los que prestan servicio no terminan de recuperars­e o lo hacen a un ritmo más lento que el resto. Para ellos, las condicione­s del juego no han variado pese al levantamie­nto del estado de alarma el 9 de mayo. Es el caso de más de 300.000 empleos vinculados directamen­te al turismo. En su caso, los empleados de los servicios de alojamient­o, de las comidas y bebidas, de las agencias de viajes o del sector aéreo, están aún pendientes de las medidas que tomen mercados emisores como Reino Unido.

«No podemos dejar al tejido empresaria­l en pelotas por firmar un acuerdo que a algunos les viene muy bien»

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