Las empresas no han visto un euro de los 7.000 millones en ayudas
Las pymes denuncian que el sistema de concesión diseñado por el Gobierno es un fiasco
Las jornadas organizadas ayer por la patronal de la pequeña y mediana empresa, Cepyme, dejaron dos conclusiones. La primera es que las relaciones entre la cúpula empresarial y el Gobierno se deterioran por momentos. La segunda, que los empresarios tenían razón cuando advirtieron de que con los esquemas diseñados para la concesión de los 7.000 millones de ayudas directas destinados sobre todo a los sectores más castigados por los cierres y limitaciones decretados por el Gobierno y las regiones –turismo, hostelería y pequeño comercio– el dinero no empezaría a fluir hasta bien entrado junio. En el mejor de los casos.
Y es que, pese a que hace más de tres meses desde que el Gobierno anunció a bombo y platillo el fondo de 11.000 millones, 7.000 en ayudas directas, las pymes siguen sin recibirlas. Al menos así lo denunció ayer el presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva, quien explicó que del grueso de las ayudas a las pequeñas y medianas empresas comprometidas el 24 de febrero «no se ha recibido ni un euro». El dirigente empresarial advirtió de que, aunque es verdad que el BOE dice que hay margen hasta el 31 de diciembre, habrá que ver qué empresa aguanta hasta esa fecha».
«De los 7.000 millones que gestionan las comunidades autónomas no se ha movido un solo euro», remarcó en las jornadas «Situación de la pyme: reapertura sin recuperación», organizada por la patronal. Cuerva apuntó directamente al Gobierno como culpable de la lentitud en la concesión de estas ayudas. «Los sistemas diseñados para la concesión de estas ayudas son ineficientes».
Además, el presidente de Cepyme coincidió con el resto de representantes de patronales en la «gran duda sobre el nivel de actividad» tras la euforia del fin del estado de alarma. «Falta mucho por hacer en sectores como el turismo. Hay mucha incertidumbre sobre el comportamiento del consumo porque aunque es cierto que el ahorro ha sido intenso, no sabemos cómo se va a comportar el consumidor y cuáles van a ser los hábitos de consumo postpandemia». A esto, Cuerva ha añadido el exceso de endeudamiento de las empresas. En estas circunstancias, el dirigente empresarial consideró que «no se debe confundir reapertura con recuperación, falta muchísimo camino por recorrer para estar en la situación de 2019». «Si ponemos ahora el listón muy alto, el futuro de las empresas es el cierre y la liquidación», afirmó, con su siguiente traslación en la pérdida de puestos de trabajo. «Los gobiernos pueden seguir escribiendo lo que quieran en el BOE, pero son las empresas, que arrancan muy por debajo de su nivel de actividad, las que van a decidir sobre el mantenimiento del empleo. Por eso hay que ayudarlas».
En este sentido, ha denunció también la inseguridad jurídica tras el estado de alarma. «Vemos que hay decisiones que tienen que pasar por los tribunales y eso complica la organización de las empresas. Las que tienen actividad en dos comunidades autónomas tienen que hacer un doble tirabuzón», dijo. Esto se traducirá, a su juicio, en un «aumento de la mortalidad empresarial y morosidad interempresarial». Para evitarlo, Cuerva solicitó estímulos similares a los del resto de Europa con los que hacer frente a los más de 15 meses «sufriendo cierres totales o parciales».
Presión del Ejecutivo
Sobre la creación de la patronal alternativa Conpymes, alentada por el Gobierno y en cuyo acto de presentación participaron la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y Begoña Gómez, la mujer del presidente del Gobierno, Cuerva mostró su preocupación por las presiones del Gobierno. «Este es un país libre para crear cualquier organización, lo que me preocupa es que el Gobierno esté cerca de cualquier movimiento de ese tipo. La presencia de la ministra (Díaz) y de la esposa del presidente del Gobierno invitando a la creación de esa plataforma es una medida de presión al diálogo social. Pero, presione el gobierno que presione, Cepyme seguirá defendiendo los intereses de la pequeña y mediana empresa por encima de todo», concluyó.