La firma de hipotecas recupera los niveles previos a la pandemia
Los 36.886 préstamos concedidos en marzo son la cifra más alta desde enero de 2020
Los indicadores van confirmando uno por uno lo que el sector inmobiliario anunció semanas atrás, que el impacto del coronavirus en la vivienda no ha sido tan profundo como se temía y que la actividad se está recuperando en forma de V. El último dato en atestiguarlo es el de la firma de hipotecas. Durante el pasado mes de marzo se concedieron 36.886 préstamos para la compra de viviendas, según la estadística publicada ayer por el INE. Se trata de la cifra más alta desde enero de 2020. Ese es el dato más relevante de este muestreo, pues su comparativa anual no tiene razón de ser. Las firmas se dispararon en tasa interanual un 35,1% dado que en marzo del pasado año el Gobierno decretó el confinamiento domiciliario para frenar el avance de la pandemia y la actividad inmobiliaria, como todas las que no eran esenciales, redujo su ritmo al ralentí.
El capital medio suscrito por préstamo también muestra una tendencia al alza. El importe medio de las hipotecas constituidas sobre viviendas aumentó un 7,2% en marzo, hasta los 137.729 euros, su mayor cifra desde la llegada del Covid, mientras que el capital prestado creció un 44,9%, hasta los 5.080 millones de euros.
La estadística de marzo también refrenda dos tendencias observadas desde hace tiempo: la preferencia de los compradores por los préstamos a plazo fijo y los históricos bajos precios de los créditos. El 56,2% de las hipotecas sobre viviendas que se constituyeron fue a tipo fijo, el porcentaje más alto de la serie histórica, mientras que el 43,8% se firmaron a tipo variable. La banca sigue, de este modo, sacando partido a la estrategia que puso en marcha cuando el euribor entró en terreno negativo años atrás. Entonces, decidió desempolvar las hipotecas a tipo fijo con precios atractivos para asegurarse unos ingresos en forma de intereses que, ahora mismo, se le escurren entre los dedos con las hipotecas variables. La explosión de las hipotecas a tipo fijo no sólo tiene reflejo en los datos de nuevos créditos firmados sino también en las subrogaciones. Cada vez son más los que cambian las condiciones de sus préstamos hipotecarios en el seno de la misma entidad o se los llevan a otras que les ofrezcan mejores términos. Y, en muchas ocasiones, esa mejora pasa por transformar su hipoteca variable en fija. En marzo, 28.458 hipotecas cambiaron sus condiciones, siete veces más que en igual mes de 2020. Atendiendo a la clase de cambio en las condiciones, se produjeron 23.951 novaciones (o modificaciones producidas con la misma entidad financiera), con un repunte anual del 679,9%. El número de operaciones que cambiaron de entidad (subrogaciones al acreedor) fue de 3.524, un 474,9% más que en marzo de 2020. El 15,9% de las hipotecas con cambios en sus condiciones fue por modificaciones en los tipos de interés. Después del cambio, el porcentaje de hipotecas de tipo fijo aumentó del 19,5% al 34,1%, mientras que el de variables bajó al 62,6%.
En cuanto a los tipos de interés, el medio al inicio es del 2,22% para las hipotecas sobre viviendas a tipo variable y del 2,75% en el caso de las de tipo fijo. Los tipos rezongan ahora mismo en los niveles más bajos de su historia empujados por la política expansiva del Banco Central Europeo (BCE), que mantiene el precio oficial del dinero en niveles extraordinariamente bajos para que la recuperación no pierda fuste.