Una nueva ciudad en llamas

«SHORTA. EL PESO DE LA LEY» ★★★

Dirección y guión: Frederik Louis Hviid, Anders Ølholm. Intérpretes: Jakob Ulrik Lohmann, Simon Sears, Tarek Zayat, Issa Khattab, Özlem Saglanmak. Dinamarca, 2020. Duración: 95 minutos. Thriller.

Shorta significa policía en árabe. Y el arranque de este thriller que no se permite un respiro pero sí oscilaciones morales, arranca con la violenta contención por parte de unos agentes de Talib, joven inmigrante de segunda generación que entra en coma tras ello. Y, mientras los agentes de policía Høyer y Andersen patrullan de forma rutinaria aunque con la impresión de que el asunto está a punto de estallar por los aires, salta la noticia: Talib ha muerto, lo que provoca que la situación se descontrole por completo. En la Dinamarca de hoy, multicultural multicultural y salpicada por las tensiones raciales, ambos agentes se encuentran en el gueto de Svalegarden cuando sus calles se levantan con las armas que tienen al alcance y juran venganza. El odio, todos los odios, es una pescadilla que se muerde la cola, los actos vandálicos comienzan, los propios habitantes del barrio se convierten en enemigos unos de otros, y entre esa pareja de uniformados en las parece que antípodas el uno del otro durante los primeros compases del filme, se produce paulatinamente un cambio de papeles, y quien no podía comprender la xenofobia, cambia; y el que querría dejar vacío el país de extranjeros pobres o repartir leña hasta convencerlos en su defecto, también. Ambos pasarán un particular y clarividente calvario acompañados por un adolescente musulmán detenido. Huidas desesperadas, calles laberínticas, ruinosas, perros tan rabiosos como sus dueños, peleas a muerte... Y, de pronto, entre tanta miseria, entre tanta rabia y sed de sangre, unas palabras cruzadas sobre el Real Madrid y el Arsenal hacen dudar al furioso. Quizá no sea demasiado tarde después de todo.

Lo mejor

Las interpretaciones de los dos agentes protagonistas, que poco a poco intercambian sus papeles

Lo peor

Alguna que otra un tanto forzada situación, como el que uno de ellos acabe en cierto piso