Falsos videntes piden 5.000 euros por pistas de las niñas de Tenerife
Siempre ocurre pero no dejar de ser sorprendente por ello. Los videntes y estafadores que suelen surgir al calor de las desapariciones mediáticas no se han echado para atrás esta vez por tratarse de dos niñas que mantienen en vilo a toda España: también hay médiums y estafadores que aseguran haber visto a Olivia y Anna y tienen las claves para encontrarlas. Eso sí, a cambio de dinero.
El portavoz de la madre de las pequeñas y presidente de SOS Desaparecidos, Joaquín Amills, dice que a lo largo de estos 38 días de angustiosa búsqueda habrán recibido unas «20 o 30 llamadas de todo tipo» donde aseguran conocer el paradero de las menores. Aunque ambos hacen perder el tiempo a los investigadores y juegan con el sufrimiento de una familia entera, Amills diferencia entre «médiums o videntes» y «estafadores». Los primeros, según el experto en desapariciones, no suelen pedir una recompensa económica a cambio. «Quiero pensar que lo hacen de buena fe: ellos creen que tienen un don, que tienen poderes especiales y dicen saber datos importantes para la investigación que luego se demuestran falsos». Asegura que estos adivinadores no suelen pedir dinero a cambio de la información pero sí le resulta curioso, dice con ironía, «que solo sueñen con los casos mediáticos y no cuando hay un desaparecido en el monte desde hace años». Éstos llaman indistintamente a la plataforma de desaparecidos o al propio cuerpo investigador, como ha ocurrido en otras ocasiones.
Sin embargo, para Amills resultan más dañinos aquellos que son, «directamente estafadores»; es decir, los que llaman diciendo que tienen datos sobre el paradero de las niñas pero que exigen dinero a cambio de la información. «Han llamado muchos a lo largo de estos días: uno de un país africano, otro de Colombia y el más reciente, hace dos días, un mexicano que aseguraba que las niñas habían sido vendidas».
Este individuo se puso en contacto con la asociación vía WhatsApp anunciando que quería «dar una información sobre Olivia Gimeno y Anna Gimeno». Cuando le contestan que qué información es esa, el estafador responde: «Sé quién las compró y dónde está cada una de ellas. ¿Están dispuestos a pagar 5.000 euros si les digo donde están?». El interlocutor simula que acepta el trato y pide una foto para saber que son ellas. El individuo no duda en acceder: «Deme 1.500 euros y en dos días tienes una foto de distancia solo de Olivia. Cuando me cumplan diré el resto».
Desde SOS Desaparecidos aseque guran que siempre actúan igual: «Les seguimos la corriente para que aporte datos y poder ir descartando». Una vez les aporta el número de cuenta y tras comprobar se trata de otro estafador, le informan de que serán denunciados ante la Brigada Tecnológica de la Policía, que averiguará quién está detrás de su falsa identidad para denunciarle por un presunto delito de estafa.
Mientras, Be atrizZi mm ermann, la madre de las pequeñas, sigue intentando mantenerse optimistas. Amills, que está muy cerca de la mujer estos días, asegura que sigue «fuerte» aunque «el tiempo pasa factura».