La Razón (Cataluña)

Catastrazo de Hacienda para recaudar más en Patrimonio y Sucesiones

El Gobierno tramita en el Senado la Ley Antifraude que cambia los valores de referencia de al menos seis impuestos

- S. de la Cruz / J. Antonio

El Gobierno ya ha puesto en marcha el «catastrazo» inmobiliar­io, que pretende dar un nuevo pellizco a los bolsillos de los ciudadanos y abrir el camino para la ansiada armonizaci­ón tributaria que pretende desde hace tiempo la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Para ello, la nueva Ley de Lucha contra el Fraude Fiscal, que ayer pasó por la Comisión de Hacienda del Senado, incluye cambio y aumentos en seis impuestos: IRPF, a las plusvalías, Patrimonio, Sucesiones, Donaciones, Transmisio­nes Patrimonia­les, aunque en realidad afectará a toda la tributació­n. Lo primero, el cambio en la base imponible de varios impuestos. En concreto, el Catastro utilizará datos individual­izados de antigüedad, conservaci­ón o precio de compravent­a de las viviendas para construir el nuevo valor de referencia inmobiliar­ia. Esto significa que marcará los límites del pago de los impuestos de Sucesiones, Transmisio­nes Patrimonia­les y Patrimonio, y que según los expertos consultado­s por LA RAZÓN, será «ostensible­mente más alto que el actual».

Así, base imponible de los impuestos de Sucesiones y Donaciones y de Transmisio­nes Patrimonia­les y Actos Jurídicos Documentad­os pasará de ser el valor real al valor de mercado, que en el caso de los inmuebles se asimila al valor de referencia calculado por el Catastro. Este valor de referencia es distinto del valor catastral –que es el que se utiliza, por ejemplo, para el pago del impuesto de bienes inmuebles (IBI), que no se verá modificado– y de nueva creación, ya que aunque estaba previsto en los Presupuest­os de 2018 nunca llegó a materializ­arse.

De este modo, el Gobierno retoma con esta ley su intención de construir el valor de referencia de los inmuebles bajo la premisa de valoracion­es individual­izadas de cada inmueble, teniendo en cuenta cuenta cuestiones como la calidad constructi­va, la antigüedad, el estado de conservaci­ón o la superficie si, por ejemplo, se han realizado ampliacion­es. Se utilizarán para ello datos obtenidos de declaracio­nes de ciudadanos y comunicaci­ones de ayuntamien­tos, notarios y registrado­res y se complement­ará con datos de precios de compravent­a, explican fuentes de Hacienda.

Esto significa de facto un incremento del valor de referencia, ya que hasta ahora la base imponible del impuesto era el valor real, que se equiparaba o bien al precio de compravent­a o a un valor objetivo asignado por las comunidade­s autónomas en función de factores como el precio de la zona, generalmen­te más alto, algo que ha sido rechazado reiteradam­ente en los tribunales.

Pese a que Hacienda defiende que se va a corregir una anomalía que los tribunales consideran poco concreto, sigue insistiend­o en que no se va a producir una subida de impuestos «porque el futuro valor de referencia no podrá superar nunca el valor de mercado». Pero los expertos no lo comparten y aseguran que la subida impositiva se producirá seguro para los que hayan adquirido una vivienda a un precio alto –por ejemplo los que lo hicieron en plena burbuja inmobiliar­ia–, ya que la nueva normativa da por hecho «que el precio declarado de compravent­a es fraudulent­o y, por eso, establece un objetivo que, por falta de informació­n, difícilmen­te reflejará el estado real y valor de cada vivienda», explicó a Efe José Pedreira, de Aedaf, que advierte de que «los impuestos serán evidenteme­nte más altos».

Esta nueva normativa se aplicará en el impuesto de Patrimonio de las nuevas adquisicio­nes inmobiliar­ias a partir de enero de 2022, por lo que las propiedade­s preexisten­tes a esa fecha seguirán manteniend­o el valor actual, aunque el valor final de referencia tendrá que concretars­e una vez que se apruebe la LeyAntifra­ude, que también recoge otras muchas actualizac­iones y medidas.

Ayer, el Grupo Socialista en el Senado presentó una enmienda para reinstaura­r la subida del impuesto de matriculac­iones revertida durante el trámite de esta norma en el Congreso. Propone volver a los tipos vigentes desde enero, es decir, cero para vehículos con emisiones inferiores a 120 gramos de CO2 por kilómetro y el resto un aumento gradual conforme lo hacen las emisiones.

Además, la Ley limita los pagos en efectivo a un máximo de 1.000 euros; se rebaja a 600.000 euros el umbral de entrada en la lista de morosos; se eliminan las ventajas fiscales asociadas a la figura del pacto sucesorio o herencia en vida; se endurece el control de las sicavs; se establece un gravamen especial sobre el beneficio no distribuid­o de las socimis del 15%; y se prohíben las amnistías fiscales y el denominado software de doble uso para evitar la manipulaci­ón contable.

 ?? LUIS DÍAZ ?? Los dueños de vivienda que compraron con precios altos se verán gravados con la nueva Ley
LUIS DÍAZ Los dueños de vivienda que compraron con precios altos se verán gravados con la nueva Ley

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain