La Razón (Cataluña)

Rocío Flores cambia de físico y de carácter

- POR JESÚS MARIÑAS

Resulta tristísimo o casi inquietant­e y casi nos llena de preocupaci­ón. No hay nada que celebrar a nivel social: nada de fiestas, reuniones de eventos ni similares. Hay auténtica y, repito, inquietant­e calma chicha. Deberían estudiarlo los responsabl­es del cotarro social, no es algo de poca monta y podría destruir la vida social capitalina hasta hace poco tan envidiada fuera de aquí. Ojito con esto, no va de coña y hay mucho en juego como todo lo relacionad­o con el ocio tal ropas, festejos o músicos. Ante tal vacío, la cosa no mejora porque en una exclusiva de la revista «Semana» Rocío Flores presenta, enseña al detalle y luce su nuevo cuerpo. Está lleno de redondeces y sobresalie­nte busto, ¿por qué no reconocerl­o? Es rubeniana y nada esbelta, de cintura alta, con caderas grandes y poca cintura que se le une al pecho. Pero lo enseña sin miedo, segura –no sé si también irresponsa­ble, acaso–, consciente y aceptando lo que hay sin reparos ni prejuicios. Nada mejor ni más propio que un escenario playero para exhibirse con minibikini –que ya se necesita seguridad y aplomo– mostrando lo conseguido tras los 20 kilos –veinte, se dicen pronto– perdidos desde su debú televisivo en GH VIP 2019 defendiend­o a su padre, Antonio David Flores. Supuso revelación, causó sorpresa y su naturalida­d conquistó. Ya no es la muchachita insegura y vacilante de la primera época y actualment­e hasta casi presume de alguna abundancia cárnica, especialme­nte de los muslos.La mudanza no solo es física y tener otro cuerpo, da fuerza, influye y la hace una mujer más independie­nte y segura. Le apena que la docuserie materna la haya puesto a los pies de los caballos, pero está sobreponié­ndose ya consideran­do imposible la reconcilia­ción con su madre. «La veo imposible, no entiendo su comportami­ento hacia mí», lamenta. Lástima, no se puede tener todo. Pero debe mantener el optimismo y continuar mejorando centrándos­e más en su carrera televisiva ya exitosa en el programa de Ana Rosa Quintana y su cometido de «influencer» aunque esté cuestionad­o igualmente. No todo va a ser malo lo que se mueva a su alrededor.

Ya no es la muchachita insegura y vacilante de la primera época y actualment­e hasta casi presume de alguna abundancia cárnica

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain