El gran clásico
Inglaterra y Alemania cierran una ronda que ha calentado el campeonato
Inglaterra y Alemania buscan un lugar en cuartos
Veinticinco años han pasado desde que Inglaterra sucumbió en los penaltis ante Alemania en la Eurocopa del «It’s Coming Home». Veinticinco años del penalti fallado por Gareth Southgate, quien ahora dirige a una Inglaterra con sed de venganza, con el mejor equipo de los últimos años y ante una Alemania con las mismas dudas que ellos. No hay favorito, porque cada selección ha dejado sombras a lo largo del torneo. Inglaterra se aferra a una solidez atrás que ha mantenido su portería a cero, mientras que su ataque es poco más que un desierto en el que Harry Kane está perdido. Que el 9 inglés marque serviría para olvidar su pobre Eurocopa y para alegrar a los 45.000 ingleses que se reunirán en el oeste de Londres, en Wembley, con ansias de vengar la afrenta del 96. «Venimos con confianza porque hemos empezado bien el torneo y todavía tenemos margen de mejora», asegura Kane.
Southgate, que sigue sin Mason Mount y Ben Chilwell, medita devolver el timón del medio a Kalvin Phillips, seguir confiando en el goleador Raheem Sterling y con la duda de la banda contraria. Jadon Sancho y Phil Foden se juegan un puesto con el que intentar herir la nerviosa zaga alemana.
Alemania llega al duelo de octavos habiendo mostrado varias caras distintas en lo que va del torneo. Una derrota ante Francia en el que el equipo de Joachim Löw fue claramente dominado, un triunfo ante Portugal en el que los alemanes se aproximaron a su mejor versión y un sufrido empate ante Hungría que representó la clasificación.
Los alemanes sufren ante todo en la parte de atrás, sobre todo en jugadas de contragolpes, pero también –eso se vio ante Hungría– tiene dificultades para generar ocasiones ante defensas cerradas.
Löw ha venido apostando por un 3-4-3 y ha mostrado la tendencia a repetir equipo. El único cambio fue ante Hungría cuando Leroy Sané empezó en lugar de Thomas Müller que tenía problemas de rodilla.
Ante Inglaterra es de esperar que Müller vuelva al equipo, pero hay otro cambio que se considera bastante probable y es el ingreso de Leon Goretzka, autor del gol del empate ante Hungría, por Ilkay Gündogan.
Goretzka llegó a la Eurocopa tras recuperarse de una lesión muscular y en los primeros partidos Löw no ha querido apostar por desde el comienzo. Ante Francia, incluso Goretzka acordó con Löw quedarse por fuera de la convocatoria y dedicarse a recuperar estado de forma.
Ante Portugal y ante Hungría tuvo minutos y los observadores vienen pidiéndolo como titular. Se trata de un jugador que aporta presencia en el centro del campo y mucha llegada y profundidad.
De resto es poco probable que Löw vaya a hacer cambios en el equipo. Al último entrenamiento volvieron Gündogan y el central Antonio Rüdiger que habían estado ausentes. «Sabemos que es un equipo con mucho peligro en las jugadas a balón parado, que defiende muy bien y tiene mucha presencia ofensiva por las bandas. Se trata de un clásico, de un partido histórico», asegura Manuel Neuer.
Inglaterra llega sin haber encajado un gol en el torneo, pero su ataque sigue a la espera de la llegada de Harry Kane Alemania ha mostrado muchas caras distintas: la mejor llegó ante Portugal y ante Francia resultó desconcertante