El Estado suma la mayor parte del desequilibrio en el déficit
La recuperación económica y la reactivación de la totalidad de sectores productivos, aunque sea en niveles inferiores a los habituales, ha tenido un efecto positivo sobre el déficit público consolidado de las Administraciones Públicas –sin contar las corporaciones locales y excluida la ayuda financiera–, que se situó al cierre de mes abril en 21.910 millones de euros, equivalentes al 1,81% del PIB, tras reducirse un 23,4% respecto respecto al mismo periodo del ejercicio anterior en el que ya se empezaban a sentir los efectos de la pandemia. Esto supone restar 6.676 millones a la cifra registrada un año antes. De acuerdo con los datos publicados por el Ministerio de Hacienda, la mayor parte de ese déficit es imputable a la Administración Central, con un desequilibrio de 16.058 millones, equivalentes al 1,33 % del PIB, cuando un año antes alcanzaba el 1,77 % del PIB. Las comunidades autónomas registraron un déficit hasta abril de 3.161 millones, lo que equivale al 0,26% del PIB, frente al 0,05% de un año antes, debido a un incremento de los gastos del 4,2%, mientras que los ingresos se mantuvieron estables. Los organismos dependientes de la Administración Central registraron a finales del mes de abril un déficit de 632 millones, frente al déficit de 245 millones de marzo de 2020, lo que supone aumento del 158% interanual, más de seis veces más de lo registrado un año antes. La Administración regional registró un déficit en abril de 3.161 millones, lo que equivale al 0,26% del PIB. Este resultado obedece a un incremento de los gastos del 4%, frente a los ingresos, que prácticamente se mantienen estables. Por su parte, el agujero de la Seguridad Social sigue creciendo. Su déficit se sitúo en 1.142,32 millones en mayo, lo que muestra una reducción del 58,4% respecto a los 2.749,83 millones contabilizados en el mismo periodo de 2020, según los datos avanzados por el Ministerio de Seguridad Social. El déficit registrado en los cinco primeros meses del año, que equivale a un 0,09 % del PIB, es la diferencia entre unos derechos reconocidos (ingresos) de 65.254,38 millones, un 8,47% en el mismo periodo de 2020, y unas obligaciones reconocidas (gastos) de 66.396,7 millones, que crecen en un 5,55% interanual. Las cotizaciones sociales sumaron 53.278,04 millones, lo que supone un incremento del 6,16% respecto al mismo periodo de 2020. Las cuentas reflejan también las transferencias recibidas por un total de 11.537,9 millones.