La baja rentabilidad dispara las comisiones hasta 240 euros
El endurecimiento de los requisitos y las penalizaciones a clientes no vinculados están motivadas por los tipos históricamente bajos
Los clientes menos vinculados pagan con creces su decisión de no domiciliar una nómina o no contratar un seguro al abrir una cuenta corriente. La penalización que sufren estos usuarios se materializa en comisiones bancarias de mantenimiento que han crecido como la espuma. Según el II Barómetro de Asufin, la banca ha elevado en el último año las comisiones que aplican a sus clientes por descubierto, mantenimiento de cuenta o tarjetas, que en algunos casos alcanzan los 240 euros anuales.
La media de comisiones se sitúa en 110 euros para el mantenimiento de la cuenta y 30,16 euros por la tarjeta de débito, que sitúan el total en 140,16 euros. Las subidas las lidera Banco Santander, Santander, que ha pasado de cobrar 144 euros a 240 euros anuales, es decir 94 euros más. Le sigue Ibercaja, de 72 a 120 euros anuales, y Kutxabank, de 60 a 100 euros anuales. También ha subido el precio de sus comisiones CaixaBank, que tras la absorción de Bankia, pasa a cobrar a sus clientes no vinculados 60 euros, frente a los 48 euros de hace un año.
El estudio evidencia que en el contexto de tipos históricamente bajos que vivimos, con márgenes de negocio muy estrechos para las entidades, se exige la contratación de otros productos para bonificar cuentas y tarjetas. Destaca el caso de Banco Sabadell, que pese a haber bajado la comisión en las cuentas no bonificadas, de 200 a 120 euros anuales, ha empezado a cobrar a quienes cumplen las condiciones 15 euros al trimestre.
Por lo que respecta a las tarjetas, CaixaBank cobra 8 euros más (pasa de 28 euros en 2020 a 36 en 2021), BBVA cobra 7 euros más (de 28 a 35 euros), Liberbank 6 euros más (de 24 a 30 euros) o Unicaja (32 euros ahora frente a 28 euros en 2020). Las polémicas comisiones por descubierto oscilan entre 30 euros, la más barata, de BBVA, y los 49 euros que cobra Banco Santander. Otras entidades que no las aplicaban, como Bankinter, Abanca y Cajamar, han comenzado a imponerlas.
La media se sitúa en 110 euros para mantener las cuentas y en 30,16 euros por las tarjetas. Un total de 140,16 euros anuales