TODO PREPARADO EN MARIVENT PARA LA ESTANCIA DE DOÑA SOFÍA ANTES DE LA LLEGADA DE LOS REYES
«QUEREMOS QUITARNOS DE EN MEDIO Y VIVIR NUESTRA VIDA TRANQUILOS», ASEGURA LA JOVEN ALMERIENSE EN EXCLUSIVA PARA LA RAZÓN TRAS CONOCER LA NOTICIA
ElEl divorcio de Enrique Ponce y Paloma Cuevas ya es una realidad. El pasado viernes saltaba la noticia de que el torero había firmado, por fin, los papeles que la empresaria ya tenía preparados desde hace meses. Ha tenido que pasar más de un año para que esta mediática separación se haga por fin oficial. Según comentó la periodista Almudena del Pozo en el programa «Estando contigo» de Castilla la Mancha Media, la ratificación se hizo efectiva el pasado 16 de julio, poniendo el colofón a 365 días de un proceso legal con luces y sombras. Una ruptura que en un primer momento se tildó como amistosa y de mutuo acuerdo, pero que finalmente podría no haber sido así de dulce. En las últimas semanas hay quien ha asegurado que habría sido Paloma Cuevas quien más inconvenientes puso a la hora de llegar a un entendimiento entre ambos, todo ello debido a la repartición que se había hecho del extenso patrimonio en común. Por su parte, Ponce se habría mostrado más predispuesto a la hora de firmar un divorcio que pone fin a 25 años de amor y vida en común. Lo cierto es que, pese a que en un momento dado se barajó la posibilidad de que ambos pudiesen recurrir a la Justicia para defender sus intereses, finalmente no ha sido necesario que el ya ex matrimonio se viese las caras en los tribunales. Enrique Ponce, por el momento no se ha pronunciado, pero la que sí lo ha hecho es Ana Soria. La joven almeriense ha hablado con LA RAZÓN tras salir a la luz la noticia del divorcio entre su pareja y Paloma Cuevas. «Nosotros somos más de playa que de hablar de nuestra vida, pero cada uno que haga lo que quiera», desliza Ana Soria haciendo alusión al hecho de que Cuevas comente su divorcio en una conocida publicación. «Queremos quitarnos de en medio y vivir nuestra vida tranquilos», concluye. La almeriense no quiere entrar en detalles ni hablar sobre nada de lo que tenga que ver con la faceta íntima de su pareja. Nunca lo ha hecho y no va a hacerlo a partir de ahora. Siguiendo la misma línea de discreción que lleva la pareja desde hace un año, no quiere pronunciarse a no ser que la situación así lo requiera. Hace unas emanas, habló para este periódico con el fin de desmentir tanto los rumores de embarazo como las informaciones que aseguraban que había roto con el torero tras la retirada de este del mundo de los ruedos. En estos momentos, y tras la calma tensa que existe a raíz del divorcio de su pareja, ambos planean su verano compartido lejos de los focos y de todo lo que tenga relación con la polémica. La pareja, que celebra el primer aniversario de su relación, disfrutará de unas tranquilas vacaciones en algunas de las playas paradisiacas en las que ya les hemos visto en anteriores ocasiones.
«SOMOS MÁS DE PLAYA QUE DE HABLAR DE NOSOTROS. CADA UNO QUE HAGA LO QUE QUIERA», DICE