Polémica en Italia por la negativa de la alcaldesa de Roma a vacunarse
Solo el 52% está inmunizado en pleno aumento de casos por la variante delta
Todavía faltan más de dos meses para que se abran las urnas, pero la batalla de la que saldrá elegido el próximo alcalde de Roma ya ha comenzado. La actual alcaldesa de la capital italiana, Virginia Raggi, exponente del Movimiento Cinco Estrellas, está en el ojo del huracán por no haberse vacunado todavía contra el coronavirus. Desde el Ayuntamiento defienden que Raggi ha tomado la decisión siguiendo las indicaciones de su médico, pero la explicación no convence a sus rivales políticos, que han atacado a la regidora por no dar ejemplo. Sólo el 52% de los italianos ha recibido la pauta completa en un momento en que los casos se multiplican por la variante delta (ayer 4.259 contagios).
«Visto el momento delicado, creo que sería importante que todos los candidatos inviten a los romanos a vacunarse», lanzó Carlo Calenda, ex ministro en los gobiernos de Matteo Renzi y Paolo Gentiloni, que se presenta a la alcaldía de la capital por Azione. El llamamiento no tuvo gran repercusión, por lo que Calenda, que abandonó el PD cuando los socialdemócratas socialdemócratas pactaron un Gobierno de coalición con el M5E, volvió a la carga poco después exigiendo a la alcaldesa que confirmara si había sido vacunada.
A la polémica se unió el candidato del PD, Roberto Gualtieri, exministro de Economía en el último gabinete de Giuseppe Conte. «No sé si la alcaldesa se ha vacunado o no. Lo que sí sé es que debería haber dado buen ejemplo invitando a todos los romanos a hacerlo. Todos se deben vacunar por encima y por debajo de los 40 años, al contrario de lo que sostienen la Liga y Hermanos de Italia. No se juega con la salud ciudadana».
La abogada, de 43 años, se contagió en noviembre de 2020 y permaneció en aislamiento hasta que resultó negativa, como marca el protocolo. Según el ministerio de la Sanidad es posible suministrar una única dosis de la vacuna a quienes hayan sido infectados, siempre que la vacunación se realice al menos tres meses después de la infección y preferiblemente dentro de los seis meses desde la misma. En el caso de la alcaldesa, han pasado ocho meses, pero Raggi sostiene que tiene los anticuerpos «todavía altos» y no necesita vacunarse.
A pesar de que Italia comenzó antes del verano una campaña de vacunación masiva sin límite de edad, no se conocen declaraciones de la alcaldesa de la capital animando a los romanos a vacunarse. Otros políticos como Matteo Salvini o Giorgia Meloni han sido menos ambiguos y han defendido sin complejos la libertad individual. «De 40 a 59, que elijan; para los jóvenes, no es necesario», dijo Salvini, que tampoco se ha vacunado.