Ortega acusa a dos opositoras de «traición a la patria»
Nicaragua vive un sinfín de detenciones a candidatos y figuras relevantes de la oposición al presidente Daniel Ortega. A tan solo cuatro meses de las elecciones presidenciales, siete precandidatos fueron detenidos ya y otros dos se han marchado al exilio. A esto hay que sumar el arresto de varias figuras relevantes de la oposición, líderes estudiantiles y hasta ex guerrilleros sandinistas críticos con el Gobierno. Hace un mes, el presidente sandinista acusó a los líderes opositores de intentar derrocarlo con el apoyo de EE UU y los tildó de «criminales».
La última candidata en confirmar su exilio fue María Asunción Moreno debido al «acoso, la persecución y la amenaza de mi encarcelamiento por parte de la dictadura». La amenaza para la opositora por parte del régimen de Ortega era más que real desde que el Ministerio Público solicitara a la autoridad su «conducción forzosa», un término judicial que hace alusión a su inmediata detención.
A través de Twitter, la abogada constitucionalista aseguró que espera «aportar más a la causa desde el exilio que aislada e incomunicada», aludiendo a la situación que sufren otros presos políticos en Nicaragua. Ella decidió dar este paso después de que su casa fuera asaltada por agentes de seguridad del Gobierno de Ortega con «extrema violencia», según relató. Durante la inspección, varios de sus familiares fueron atacados y la Policía no presentó ningún tipo de orden judicial.
También se anunció la «conducción forzosa» contra la opositora Daysi George West, perteneciente al partido Alianza Cívica, quien denunció el allanamiento policial en su casa y la desaparición de su hijo: «No sé dónde está mi hijo, tampoco sé cuántas destrucciones han hecho (en la casa)», señaló. George es crítica con los sandinistas, a los que acusa de implementar una política de «saqueo, confiscación y violación de la Constitución».