Salud modifica con alevosía los baremos del toque de queda
La comunidad abre la vacunación a la franja de edad de entre 12 y 15 años
Aunque la quinta ola esté ya de bajada, la Generalitatacordó aye endurecer la aplicación del toque de queda. La portavoz del Govern, Patrícia Plaja, explicó que ahora la Generalitat prorrogará el confinamiento nocturno cada 14 días (ahora es cada siete días) y se incluirán a todos los municipios con más de 5.000 habitantes que tengan una incidencia a siete días por cada 100.000 habitantes de 250 casos, cuando ahora son 400 casos.
Plaja explicó que, a pesar de que los contagios están ya de bajada desde hace más de una semana, la presión hospitalaria sigue siendo muy alta y tardará mucho en bajar. No obstante, la autorización de esta medida depende del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSC), que hasta ahora ha ido avalando el toque de queda propuesto por la Generalitat. «250 casos sigue siendo una cifra muy alta», expuso, aunque también afirmó que la referencia límite deberían ser 125 casos.
Ante esta nueva situación, la Generalitat aumentó a 176 la lista de municipios en los que prevé decretar un confinamiento nocturno entre la 1.00 y las 6.00 de la madrugada durante una semana más en su petición de prórroga al TSJC que resolverá en los próximos días si da luz verde a las medidas de la Generalitat como ha ocurrido hasta ahora desde que volvió el toque de queda.
En este sentido, ya el conseller de Salud, Josep Maria Argimon, advirtió el lunes de una posible sexta ola en los próximos meses tras ver el comportamiento del virus con la reapertura de todas las actividades. En Cataluña, además del toque de queda aplicado de las 1 a las 6 horas, está cerrado todo el ocio nocturno. Esta alerta que lanzó el conseller dio a entender que en Cataluña todavía quedan varias semanas se restricciones severas.
Lo cierto es que la quinta ola ya cosecha varias semanas de bajada: a mediados de julio, la incidencia acumulada a 14 días llegó a estar en 1.158 casos y ahora está ya en 860 casos. La Rt también lleva días bajando y ya está en 0,75, siempre que esté por debajo de 1 significa que la pandemia retrocede. Pese a estos datos, todavía se siguen notificando diariamente más de 3.000 contagios ayer fueron 3.478 casos, una cifra bastante alta.
Sin embargo, la presión hospitalaria sigue siendo muy elevada: si los hospitalizados empezaron a bajar ayer, aunque todavía hay 2.226 ingresados, los pacientes en UCI siguieron creciendo y ya hay 589. Con el número de pacientes en UCI, se ronda la misma presión que hubo durante la segunda ola que llegó a cifras cercanas a los 600ingresados en estado grave.
Ante la recta final de la quinta ola, Cataluña quiere intentar que la vuelta a los colegios sea lo más segura posible. Pere Aragonès anunció también ayer que se abre a partir de hoy la vacunación a los jóvenes de entre 12 y 15 años, un colectivo de 300.000 personas en Cataluña. Con esta medida, se pretende llegar al inicio del curso con los jóvenes vacunados al máximo posible.
Con este grupo de población, Cataluña seguirá ampliando el porcentaje de personas vacunadas. En estos momentos, en la autonomía hay un 58% de la población ya con pauta completa (con ambas dosis) y un 64,8% con una dosis. De esta manera, se va acercando poco a poco a la inmunidad de grupo, que ahora, a raíz de la irrupción de la variante Delta, mucho más contagiosa, está en el 85-90% de vacunados.
Aunque encima de la mesa ya se empiece a barajar la tercera dosis de la vacuna en ciertos colectivos, lo cierto es que Cataluña aún necesita un último empujón para llegar a la inmunización necesaria y así hacer frente al virus. La llegada de a nueva variante Delta hizo cambiar las predicciones más optimistas que confirmaban que con un 70% de vacunados se podía controlar la pandemia. Tras la infección masiva de la quinta ola de contagios con esta alteración del virus y sus efectos, todo hizo cambiar de parecer a los responsables que volvieron a ponerse en alerta.
Con operaciones canceladas en los hospitales y las vacaciones de los sanitarios en entre dicho, todo parece indicar que el mes de agosto seguirá siendo muy duro en los centros lo que provocará que volvamos a vivir un verano muy atípico.
El toque de queda y las limitaciones en grupos, entre otras, parecen ser restricciones seguras hasta finales de el presente mes de agosto si la situación no da un giro radical en las próximas semanas. Desde la Generalitat se ha incrementado la alarma a la población para tratar de frenar los contagios y, además, intentar que aquellas personas que no están pero ya pueden vacunarse lo hagan finalmente. Esto daría un gran empujón a la campaña y permitiría hacer frente a una nueva ola como la alertada por Argimon de otra forma.