Juanjo Cardenal: «Solicité jubilarme en febrero para grabar el 25 aniversario»
Con 72 años ha sido durante 24 «la voz» del concurso de La 2 «Saber y ganar»
Juan José Cardenal se ha convertido en el hombre del momento y no por lo que hace, si no por lo que dejará de hacer el próximo 23 de agosto. «Saber y ganar», el concurso más longevo de la televisión perderá su famosa «voz» que pasará el testigo a Elisenda Roca después de 24 años haciendo la introducción del programa, leyendo las preguntas y bromeando con Jordi Hurtado.
-¿Le nacieron en Madrid?
-19 de marzo de 1949, día de San José. Nací en Madrid como cuatro de mis hermanos y somos cinco. Uno nació en Cataluña. Mi papá era médico y obtuvo una plaza en el 51. Como tenía cuatro churumbeles, los metió en una mochila, y se vino para Cataluña. -Estudió Arte Dramático, pero no hizo de ello una profesión: ¿No daba dinero?
-Fue complejo. Hice Arte Dramático los tres cursos en el Instituto de Teatro de Barcelona y estuve dando vueltas por ahí con el teatro y con una furgoneta, cuando se hacía mucho teatro independiente. Cuando nació el TEI de Madrid; cuando nació Tavora haciendo sus espectáculos de flamenco.
-Y entonces estudió Filosofía -No. Estudié filosofía a la vez que estudiaba en el Instituto del Teatro. Por la mañana iba a la facultad y por la tarde hacía teatro. Cuando ya acabó eso, entonces ya me metí en la radio, y de ahí ya pasé a la televisión.
-Estuvo trabajando en Colombia, ¿cómo acabó allí?
-Yo estaba llevando la producción de un espectáculo que se llamaba «Dancing» en el Teatro Condal de Barcelona, que estuvimos dos años, entonces nos fuimos un mes a México y a Colombia al Festival Iberoamericano. En Colombia… pues me enamoré..
-¿Qué recuerdos guarda de «Si lo sé no vengo»?
- Todos los recuerdos que guardo son buenos, porque era muchísimo trabajo y lo hacíamos en un plató muy pequeñito. Y ahí se colocaban todas las pruebas: metíamos un elefante, lo convertíamos en una estación de esquí con bolitas de porex para que pareciera nieve… Cuando terminaba el programa todo el personal estuvo recogiendo las bolitas, desde el productor hasta el director y los cámaras. Otra época.
Además, un dato que se desconoce es que «yo era el que probaba todas las pruebas para saber si el concursante tenía que encestar tres veces un balón mientras andaba en patinete y dos chinos le estaban haciendo cosquillas». Así que, asegura Juanjo, «me lo pasaba de miedo».
-¿Es cierto que también participó en «El tiempo es oro»?
- Escribí algunos guiones para «El tiempo es oro». Ahí empecé a trabajar con Sergi Shaff. En ese momento, salvo mi estancia en Colombia, he estado trabajando con él, de una manera o de otra. -¿Alguna vez le ha confesado por qué le eligió a usted? -Porque sabía que era el mejor. Como él es muy inteligente, dijo yo no puedo perder esta joya.
En el especial de «Saber y ganar» del pasado 21 de agosto, Juanjo Cardenal leyó varios poemas porque confiesa que «me gusta leer y recitar poesía» y de hecho ha participado en recitales por la geografía española.
-Pero sin embargo no escribe poesía. -Has pinchado, has fallado la pregunta de los 5.000 dólares, porque sí que escribo poesía. Otra cosa es editarla o leerla. Solamente la leo con mi familia y mis hermanos. -Confesó que tenía una docena de cuadros sin terminar, ¿qué motivos pinta?
-Soy absolutamente ecléctico. Pinto lo que me apetece y lo que me da la gana en cada momento. Pero si me quieres poner un letrerito, pues yo pondría expresionista. -Después de 36 años trabajando junto a Jordi Hurtado, no me creo que no tengan más relación que la profesional -Tenemos una relación muy buena, pero puramente profesional. Si tuviera relación te daba una exclusiva y te ascendían, pero como no… y no hay ningún motivo: con otros sí y con él no. Ni yo con él, ni él conmigo. Si nos encontráramos en un restaurante, nos sentaríamos en la misma mesa y sería una velada estupenda.
-La jubilación ha sido «obligatoria» con 72 años, ¿por qué ha tardado tanto?
-Hombre, uno no se jubila si no quiere. Pero bueno, se firmó en diciembre un convenio, donde había una cláusula que decía que a los que habían cumplido la edad y tenían 100% de cotización, se tenían que jubilar en el lapso de seis meses. Se intentó hablar con Madrid, el director también, porque solicité que me dejaran jubilarme hasta el 17 de febrero, para grabar el 25 aniversario.
Juanjo no puede evitarlo y dice: «Me has hecho tantas preguntas, te voy a hacer yo una: Esta entrevista, ¿es para LA RAZÓN o para el Cesid?». Sabio, genio y figura.