Barceló La Nucía, la última cita obligada de la costa de Levante
Situado en el municipio de La Nucía, la cadena hotelera acaba de abrir este nuevo hotel de 5 estrellas y 148 habitaciones ideales para huéspedes que viajan en familia o en pareja
A
pesar de que el sector turístico, y particularmente la industria hotelera, ha pasado por su «annus horribilis» por culpa de la pandemia de la Covid, las grandes cadenas han mantenido todo su engranaje a pleno rendimiento para sorprender ahora con nuevas aperturas. Buen ejemplo de ello es Barceló Hotel Group, que no ha cejado en el empeño de seguir buscando emplazamientos únicos para sorprender al huésped. Fruto de ese esfuerzo ahora acaba de abrir sus puertas, hace apenas unas semanas, Barceló La Nucía Palms, un establecimiento de nueva construcción con 148 habitaciones y categoría cinco estrellas que ofrece un equilibrio perfecto entre playa y naturaleza.
Situado en el municipio de La Nucía, al norte de la provincia de Alicante, este nuevo hotel destaca por atractivos tan sugerentes como sus jardines y zonas exteriores con piscinas, un restaurante buffet de gastronomía mediterránea, el gastrobar «La Santa María», un completo B-Heaven rooftop bar con vistas, así como un centro spa & wellness, entre otras instalaciones.
Su perfecta situación cercana tanto a la playa de Levante como al Parque Natural de Sierra Helada convierte a Barceló La Nucía Palms en el alojamiento ideal para disfrutar de la comodidad y del descanso, ya sea en pareja como en familia.
SU UBICACIÓN RESULTA PERFECTA, CERCANO A LA PLAYA DE LEVANTE Y AL PARQUE NATURAL DE SIERRA HELADA
Y lo cierto es que no hace falta irse muy lejos para lograr la desconexión tan ansiada que nos pide el cuerpo después de estos duros meses de pandemia, ya que el universo vegetal es el gran protagonista de Barceló La Nucía Palms, donde sobresalen sus jardines de inspiración caribeña, y distintos espacios que transmiten una sensación de relax y sosiego muy necesaria en este momento, convirtiéndose así en un pequeño oasis de armonía dentro del hotel. De hecho, la parte del lago simula una playa con dos penínsulas, donde se encuentran una zona chill-out y un jacuzzi, donde se funde agua y vegetación, mientras que en el rooftop «B-Heaven» el estilo alargado y el juego visual de las líneas horizontales blancas y azules atrapan todas las miradas. Aunque para dejarse mimar, nada mejor que pasar por el spa, pues está diseñado para que los huéspedes disfruten de un espacio que proporciona calma a través de la pureza, el relax y las emociones.
Por su parte, las habitaciones destacan por su exclusividad y amplitud, mientras que en el apartado gastronómico tampoco defrauda la acertada apuesta por la cocina mediterránea con las mejores materias primas de la zona. Sin duda, la suma de ingredientes perfecta para un viaje redondo.