«MI HISTORIA EN EL REAL MADRID YA ESTÁ ESCRITA»
EscritaEscrita y bien escrita, rubricada con letras de oro, iluminada como la mejor de las capitulares del más preciado códice, sin duda alguna, como los chorros del oro, pero, si hasta el mejor escribano comete algún borrón, quizá usted, señor Ronaldo, tenga que admitir que algún error haya cometido en relación a esas informaciones o como usted diría esa «pura palabrería», porque una de las bazas para firmar esos contratos a años luz de los que firman los jóvenes de hoy día, es que llevan no sólo su firma, sino su nombre, su imagen, sus goles, sus trofeos... en fin, que como no es usted agente de la KGB, quizá se haya filtrado información, interesada o no desde su entorno, por decirlo de alguna manera y no toda la culpa sea ajena. Por otro lado, como dirían los caballeros medievales franceses, hay que aplicar las normas con «largesse», comprenda pues, que la noticia de su regreso al Real Madrid, aunque solo fuese un rumor, haya despertado la ilusión de la afición merengue a la que tantos días de alegría le ha dado, una grada que nunca renuncia a la excelencia de tener a los mejores jugadores en el mejor club del mundo; y otro tanto se puede decir del resto de equipos que también se han «apuntado» a los rumores de su fichaje, aunque sólo sea por el prestigio de la posibilidad de contar con tan laureado jugador entre sus filas, ya que son pocos los que puedan si quiera ser nombrados para tamaña tarea, colosal desafío, como es el ficharle, aunque sea el Sporting de Lisboa, que diría su mamá.