España, «preparada» para administrar la tercera dosis
Darias anuncia que la próxima semana la Ponencia de Vacunas trasladará una propuesta a las comunidades
«Nuestro país está preparado para inocular la tercera dosis, pero hay que definir el cuándo, a quién y si la hacemos coincidir con la vacuna de la gripe». La ministra de Sanidad, Carolina Darias, anunció ayer tras el pleno del Consejo Interterritorial que la semana que viene la Ponencia de Vacunas emitirá una propuesta sobre este refuerzo vacunal. Estos expertos, dijo, llevan trabajando sobre la estrategia todo agosto y «la semana que viene esperamos, como les he trasladado a los consejeros, que tengamos una propuesta», apostiló la titular de Sanidad.
La ministra, no obstante, aclaró que también se van a tener en cuenta los ensayos puestos en marcha por Pfizer sobre la efectividad de una tercera dosis de su vacuna actual, y por Moderna, que está evaluando una nueva reformulación de su compuesto frente a las nuevas variantes. También están a la expectativa, prosiguió la ministra, de la postura de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) y de la evidencia científica generada por un estudio propio, que va a poner en marcha el Instituto Carlos III, sobre la inmunidad en las residencias de ancianos.
Los mayores, junto con ciertos colectivos vulnerables como los inmunodeprimidos y trasplantados, son los candidatos a recibir este «booster». Por eso, el Carlos III va a poner en marcha este ensayo ya que «es posible que la inmunidad generada en mayores dure menos y que la calidad de sus anticuerpos sea diferente a la de los jóvenes», expuso el director de este organismo, Cristóbal Belda. «Crearemos una cohorte que nos permita caracterizar la calidad de sus anticuerpos, su capacidad neutralizante y su inmunidad celular. Vamos a analizar ese perfil inmunológico ahora y a lo largo del tiempo, y su respuesta frente a las variantes que vayan apareciendo», aclaró Belda.
Si finalmente España adopta una decisión sobre la tercera dosis la semana que viene lo tendrá tendrá que hacer, previsiblemente, sin tener un postulado de la EMA. La agencia europea dijo ayer a Efe que «en esta etapa, aún no se ha determinado cuándo podría ser necesaria una dosis de refuerzo», ni tampoco «en qué poblaciones habría que centrarse», en caso de que «confirmarse la necesidad». Una fuente de la agencia subrayó que «aún se están revisando los datos emergentes (de las campañas de vacunación en marcha dentro y fuera de la Unión Europea) para hacer las recomendaciones que puedan ayudar» a los países europeos a tomar una decisión.
Los expertos de la agencia seguirán analizando la información disponibles y nos e atreven a dar ninguna fecha para dar una decisión al respecto.
Dos estudios publicados ayer parecen indicar la necesidad de este «booster». Expertos a cargo de la investigación Zoe Covid en el Reino Unido aseguraron que la protección contra las infecciones por Covid-19 en personas que están completamente vacunadas con los preparados de AstraZeneca y Pfizer comienza a disminuir en un plazo de unos seis meses hasta a un 67 y un 74% respectivamente.
Las investigaciones de los CDC de EE UU apuntan en la misma dirección. Según un estudio de los trabajadores de la salud, la efectividad contra el contagio de las vacunas de Pfizer y Moderna cayó del 91% al 66% después de que la variante Delta del coronavirus se convirtiera en dominante.