El 36% de graduados superiores ocupa un trabajo de baja cualificación
España queda así muy lejos de la media europea, que es de uno de cada cuatro
La Fundación Conocimiento y Desarrollo presentó ayer su decimoséptimo Informe CYD sobre el sistema universitario español. Éste, dedicado al año 2020 y marcado por la pandemia ya que las instituciones de enseñanza superior han conseguido llevar a cabo el cambio de una docencia presencial a otra online sin prácticamente transición. Cerca de un 90% de las universidades de todo el mundo cerraron, al menos parcialmente, sus instalaciones, y más del 80% llevaron a cabo el cierre durante un mínimo de 8 semanas y hasta más de 28.
El presidente de Crue Universidades Españolas, José Carlos Gómez Villamandos, afirmó durante la presentación que la sobrecualificación de los titulados universitarios se debe a «la falta de oportunidades» del tejido productivo. Y es que el informe advierte de la elevada sobrecualificación de los jóvenes licenciados –ocupados universitarios en puestos de baja cualificación–, con la tasa más alta de la Unión Europea. En 2020, el 63,9 % de los graduados superiores españoles estaban trabajando en puestos de alta cualificación, el dato más reducido de todos los países de la UE: queda a casi 13 puntos de distancia.
En la UE-27, el 76,5 % de los graduados superiores con empleo desempeñaba tareas de alta cualificación; menos de uno de cada cuatro, pues lo hacía en ocupaciones de baja cualificación, frente a más del 36% de España.
Según Gómez Villamandos este hecho se debe a «la falta de oportunidades que se ofrece a nuestros jóvenes» por parte del tejido productivo del país. Ha recordado que el documento «España 2050» apunta a que el «primer desafío» como país es «ser más productivo» e identifica a la estructura empresarial, formada mayoritariamente por micro empresas, como una de las «graves debilidades» de la economía española que «lastra la productividad y competitividad».
Respecto a flexibilizar la oferta académica para responder mejor a las demandas de la sociedad, el presidente de Crue ha indicado que las universidades «quieren y pueden» abordar esta realidad, no sin advertir de que el servicio público implica mantener oferta de grados con baja matrícula en ámbitos necesarios socialmente. «¿Se imaginan que hubiésemos cerrado Matemáticas como hace no mucho tiempo se nos demandaba?», ha preguntado, para responder que ahora es de las carreras más solicitadas.
En el acto de ayer, conducido por la presidenta de la Fundación CYD, Ana Botín, han intervenido también el director del Barcelona Supercomputing Center, Mateo Valero, y el ministro de Universidades, Manuel Castells.