La «paguilla» de las pensiones costará 1.900 millones
El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, calculó ayer que la paga compensatoria para los pensionistas, conocida como «paguilla», por el alza del IPC por encima del 0,9% del incremento de las pensiones este año costará 1.900 millones de euros, que se abonarán en el mes de enero, previsiblemente, pero con efecto presupuestario en 2021. La de 2022 será la última «paguilla» de la historia. Se abonará tomando como referencia el IPC de noviembre del año anterior y su cuantía rondará los 200 euros de media. Esta cifra hay que duplicarla, ya que a la parte de compensación por la desviación presupuestaria (1.900 millones) hay que sumarle la misma cuantía para consolidar la nómina de las pensiones cara a 2022 (otros 1.900 millones). Por tanto, el monto total para este fin rondará los 3.800 millones de euros. Escrivá indicó, durante la presentación de los presupuestos de su Ministerio, que la Seguridad Social espera para 2022 unos ingresos de 136.344 millones de euros de las cotizaciones sociales, un 7,5% más sobre la liquidación prevista para 2021, lo que supone una vuelta a los niveles prepandemia.
Estos presupuestos incluyen una reducción del déficit de la Seguridad Social cercano a medio punto del PIB para 2022 gracias a esa recuperación de los ingresos por cotizaciones sociales y a la aproximación del número de cotizantes al de afiliados a la Seguridad Social.
El Gobierno confía en que para el final de la legislatura, en 2023, la Seguridad Social encuentre su equilibrio presupuestario entre gastos e ingresos y se produzca un «cierre casi definitivo del déficit» endémico desde la crisis de 2008. La cartera de Escrivá espera seguir avanzando en el próximo ejercicio en el proceso de asunción de gastos impropios.