El TS mantiene a Delgado al frente de la Fiscalía General
► Los magistrados no entran a valorar su «idoneidad» porque consideran que PP y VOX no pueden recurrir
La Sala de lo Contencioso del Tribunal Supremo inadmitió ayer los recursos que habían presentado PP y Vox en contra de la designación de Dolores Delgado como Fiscal General del Estado. Los partidos buscaban que el alto tribunal se pronunciara sobre la «idoneidad» de la exministra de Justicia para el cargo porque consideraban que no era apropiado que se incorporara a dirigir el Ministerio Público directamente desde el Gobierno socialista. Sin embargo, el Supremo no ha entrado al fondo de la cuestión, sino que ha rechazado directamente el recurso porque considera que los partidos de la oposición no están legitimados para recurrir, según confirman fuentes jurídicas.
Esto se traduce en que Delgado podrá seguir al frente de la Fiscalía General del Estado hasta que se cumpla su mandato que finaliza cuando decae el Gobierno. La Sala no se ha pronunciado, por tanto, sobre la «independencia» de la exministra, puesto que se ha quedado en el primer escollo jurídico: saber si PP y Vox podían recurrir el decreto de su nombramiento de febrero de 2020. El partido de Pablo Casado y el de Santiago Abascal argumentaban que sí porque lo que haga la Fiscalía les puede afectar directamente. Una visión opuesta a la que mostró la Abogacía del Estado que defendió que los partidos miraban por intereses globales y que no tenían ningún interés particular en la demanda.
La sección cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo ha quedado más convencida por la versión de los Servicios Jurídicos del Gobierno. La sentencia -que todavía no se ha hecho pública, pero cuyo fallo se ha adelantadoha salido adelante por cinco magistrados a favor (la ponente Pilar Teso, el presidente de la Sala César Tolosa, así como Celsa Pico, Pablo Lucas y Luis María Díez Picazo) y dos en contra (Antonio Jesús Fonseca-Herrero Fonseca-Herrero y José Luis Requero) que han anunciado que emitirán votos particulares.
Casi dos años después de que la exiministra cambiara el despacho en Justicia por el del edificio de la Fiscalía en la madrileña calle de Fortuny termina el debate sobre su independencia y ya es seguro que permanecerá en el cargo, a no ser que el presidente Pedro Sánchez decida cesarla. Cabe recordar que la designación de Delgado suscitó polémica también dentro del órgano de gobierno de los jueces. El Consejo General del Poder Judicial emitió un informe no vinculante en el que avalaban a la persona escogida por Sánchez pues cumplía los requisitos de ser jurista de prestigio con más de 15 años de carrera-, pero no entró a calificar su «idoneidad», como sí lo habían hecho en nombramientos anteriores. De hecho, siete vocales emitieron votos particulares para exponer que a su juicio la elección perjudicaba la imagen de imparcialidad de la Justicia.
No existen antecedentes similares revisados por el alto tribunal. El único, el del exfiscal Eligio Hernández, fue anulado en 1994 porque la Sala consideró que no cumplía con el requisito de los 15 años de carrera al no computar el tiempo que pasó como gobernador civil y delegado del Gobierno en Tenerife. En este caso, un grupo de nueve magistrados trató de que la decisión la viera el pleno de 27 miembros de mayoría conservadora, pero el presidente se opuso a esta propuesta.