La OCDE, igual que Escrivá, apuesta por atrasar la jubilación
► Pide demorar la retirada dos años por cada tres que suba la esperanza de vida
La OCDE se alineó ayer con las tesis del ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, que a finales de septiembre abogó por «un cambio cultural en España» en empleo que permita seguir la «tendencia clara» que hay en el resto de Europa, donde «entre los 55 y los 70 o 75 años se trabaja cada vez más». El club de los países más ricos del mundo también cree que es necesario que los trabajadores se retiren más tarde para cuadrar las pensiones. Aunque, a diferencia de Escrivá, que matizó sus palabras y aseguró que no es partidario de retrasar la edad legal de jubilación, la OCDE sí apuesta por ello.
La organización cree que el llamado factor de sostenibilidad que eleva la edad de jubilación conforme crece la esperanza de vida es una de las mejores formas de afrontar el aumento del gasto público por el envejecimiento de la población que en los próximas 40 años afectará de forma muy particular a España. En un informe de proyecciones para el horizonte de 2060, la OCDE calcula que, si la deuda pública se mantuviera estable de aquí a entonces, la presión fiscal en sus países aumentaría globalmente en 8 puntos de producto interior bruto (PIB). Ese incremento, que se explica sobre todo por las necesidades por el envejecimiento de la población en términos de cuidados, de sanidad y de pensiones, sería mucho más elevado en España, de 13,23 puntos del PIB.
Teóricamente, esa mayor presión fiscal se puede absorber de tres formas: con más impuestos, con más deuda pública o con reformas estructurales. En el caso de España, apuesta por cambios para una menor dualidad del mercado laboral, para combatir el paro juvenil y aumentar la flexibilidad, pero sobre todo para hacer más sostenible el sistema de pensiones. Esto último debería traducirse en acabar con las prejubilaciones, acercar la edad de jubilación efectiva a la edad legal (que en España es ahora de 65 años, pero debe aumentar a 67) y especialmente vincular esa edad a la esperanza de vida. En España, el Gobierno de Mariano Rajoy instauró ese factor de sostenibilidad en 2013 para que entrara en vigor a partir de 2019, pero el Ejecutivo de Pedro Sánchez decidió derogar su reforma para instaurar un «mecanismo de equidad intergeneracional» que está por definir.
La regla que propugna la organización es la aplicada en Portugal: subir la edad de jubilación dos tercios del alza de la esperanza de vida. Por ejemplo, si la esperanza de vida mejora en tres años, retrasar en dos años la jubilación.