La Razón (Cataluña)

Cambio en los paradigmas estratégic­os

- Luis Feliu Bernárdez Luis Feliu Bernárdez es General de Brigada (r). Academia de las Ciencias y las Artes Militares

NosNos hemos enterado por el del primer ministro francés contra su homólogo australian­o de una nueva iniciativa de asociación estratégic­a llamada AUKUS. Iniciativa firmada por Estados Unidos, Reino Unido y Australia. Esta asociación o acuerdo estratégic­o parece surgir de la antigua, al menos yo la conozco desde hace mas de 15 años, den om in ad aFI VE EYESqu ere presenta una gran agencia de inteligenc­ia militar junto con Canadá y Nueva Zelanda y que tiene centros de inteligenc­ia y todo tipo de medios de captación de informació­n ubicados en esos países.

AUKUS supone un acuerdo para el desarrollo de nuevas capacidade­s militares basadas en la inteligenc­ia artificial, en los ordenadore­s cuánticos, en lacibern ética yen la cooperació­n industrial, además de suponer la transferen­cia de tecnología de propulsión nuclear a Australia para ocho construir submarinos nucleares estratégic­os, anulando el contrato de los doce submarinos convencion­ales con la empresa francesa Naval Group.

Estados Unidos con el precipitad­o sus compromiso­s en Afganistán culmina un proceso de retirada que se atisbaba desde 2014 y se veía con claridad desde 2016 culminando este año 2021. Naturalmen­te la fuerza expedicion­aria que mantiene EE.UU en Corea del Sur, en Japón y cada año más importante en la antigua isla española de Guam se mantiene o incrementa pues añade valor a ese movimiento estratégic­o de Norteaméri­ca y el Reino Unido hacia la zona Indo-Pacífico. China que aparece ahora muy desairada ante el acuerdo AUKUSestái­mpuls ando desde hace años un plan de modernizac­ión y ampliación de capacidad es militares con el objetivo de alcanzar en 2025 la supremacía en el continente y su expansión en el mar de China. Casi al mismo tiempo, en el año 2016 Reino Unido decidía abandonar la Unión Europea y la Rusia de Pu t in lanzaba diversosór­dag os estratégic­os, en Siria, en Libia y en el Báltico, después de la anexión de Crimea.

Estos cambios conducen a un nuevo entorno estratégic­o en el que los EEUU y sus aliados preferente­s han puesto su mirada en contener a China en el área Indo-Pacífico. China por su parte no solo ha exportado a nivel mundial la p ande miad el SARSCOV2/COV ID 19 sino que ha empezado a dominar el precio de la energía y de las materias primas y su disponibil­idad en todo el mundo. Si quieren saber por qué el precio del gas está tan elevado y con ello el de la electricid­ad, miren a China y no a las eléctricas españolas. Por otro lado los acuerdos comerciale­s de China con muchos países de centro y sur América presiona a los Estados Unidos y trata de privarles de su área de estabilida­d meridional. Con las debidas reservas y manteniend­o las distancias, si la URSS en 1962 trataba de presionar a los EEUU en Cuba con Hard Power, nuclear, China lo está haciendo 60 años después con Soft Power, comercial. No tengo espacio para comentar la invasión comercial de China en África que condiciona­rá todo el desarrollo del continente.

Se preguntará­n Vds en todo este entramado que pinta la Unión Europea, liderada estratégic­amente por Francia después de la fuga del Reino Unido. Pues me temo que poco, muy poco. China y el Pacífico es la nueva «falla estratégic­a» que en cualquier momento puede desencaden­ar movimiento­s sísmicos o maremotos político-económicos o militares del tipo de «cisne negro». Por otro lado, me da la sensación de que Estados Unidos no ve a la Alianza Atlántica como un elemento estratégic­o de su política exterior y pudiera desprender­se de esos aliados europeos poco fiables que contribuye­n débilmente a la OTAN. Además nos encontramo­s con el anuncio del acuerdo informal de colaboraci­ón entre India, Estados Unidos, Japón y Australia para contener la expansión china, que se une a los veteranos tratados de seguridad de Estados Unidos con Filipinas y Taiwan.

Esta nueva estructura geoestraté­gica de seguridad tiene el foco puesto en China y no en Rusia, por ello las Alianzas Estratégic­as para la seguridad y defensa de Europa no parecen importar mucho. Para el Reino Unido la Unión Europea está perdida estratégic­amente desde hace tiempo y es incapaz de tomar una sola decisión. La Europa continenta­l languidece como una bella durmiente, con un Reino Unido que se encuentra muy cómodo en el nuevo escenario.

Sin embargo, los acuerdos mencionado­s ponen a China en una situación muy incómoda, la misma que muestra la debilidad de Europa ante Rusia incapaz por sí sola de dar garantía de seguridad a los países del Este de Europa. Tengo la impresión que Noruega, Dinamarca, Holanda, Polonia, Hungría y la República Checa solo podrán confiar en la nueva alianza transatlán­tica entre Reino Unido y Estados Unidos para su seguridad. El mundo se transforma a gran velocidad, las alianzas cambian (colaboraci­ón en Defensa entre Marruecos e Israel) y surgen nuevas amenazas. Se está definiendo el liderazgo de este siglo y Europa por un lado y España por otro andan como pollos sin cabeza.

 ?? BARRIO ??
BARRIO
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain