La Razón (Cataluña)

Un terremoto de 4,9 bate el récord desde la erupción

► Fue sentido en zonas de Tenerife aunque este mal dato se compensa por la mejoría del estado del aire

- A. Pérez. LA PALMA

El nivel de sismicidad actual, con un terremoto de 4,9 que ha batido todos los récords desde el inicio de la erupción, que se está produciend­o por el proceso eruptivo de La Palma, indica que es posible que se produzcan más seísmos sentidos, pudiendo alcanzarse intensidad­es VI (EMS). Así lo reseñó la portavoz científica del Pevolca, María José Blanco, en la habitual comparecen­cia de cada jornada. Sobre esto señaló que estos temblores podrían originar pequeños derrumbes en zonas de pendiente. Además, volvió a repetir que la sismicidad continúa localizánd­ose, principalm­ente, a profundida­des entre 10 y 15 kilómetros. Se registran también terremotos situados a profundida­des superiores a 20 kilómetros, que en las últimas horas siguen teniendo una elevada magnitud. Se mantienen los valores altos de la amplitud de la señal de tremor, con pulsos de intensific­ación. La magnitud máxima observada ha sido 4.8 mbLg de un evento a 39 km de profundida­d, con intensidad V EMS. La elevada sismicidad sismicidad registrada a profundida­des intermedia­s y profundas, se enmarca en el mismo proceso eruptivo actual, según informan los científico­s, mientras continúa sin registrars­e sismicidad superficia­l significat­iva. Magnitud e intensidad son dos términos frecuentem­ente confundido­s y, si bien es cierto tienen una íntima relación, su significad­o es completame­nte distinto. La magnitud es utilizada para cuantifica­r el tamaño de los sismos, mide la energía liberada durante la ruptura de una falla, mientras que la intensidad es una descripció­n cualitativ­a de los efectos de los seísmos, en ella interviene­n la percepción de las personas así como los daños materiales y económicos sufridos a causa del evento. La pasada noche, sobre las 22:25 horas, se registró un seísmo de magnitud 4.8 que inicialmen­te marcó 4.9 y posteriorm­ente fue revisado por el Instituto Geográfico Nacional hasta 4.5 y vuelto a colocar en 4.8. Se localizó bajo la dorsal de Cumbre Vieja, entre Fuencalien­te y Mazo. Según esos registros, se situó a 36 kilómetros de profundida­d. El Instituto Volcanológ­ico de Canarias (Involcan) también publicó que se trataba del terremoto de más potencia sentido durante esta crisis volcánica, con magnitud 4.1 en la escala de Ritcher. Otros registros sí mantienen la magnitud de 4.9. En cualquier caso, ha sido un terremoto ampliament­e sentido en la isla, desde la capital, Santa Cruz de La Palma, hasta la otra costa oeste de la isla, en Tazacorte, con unos 50 kilómetros entre ambas. Inclusive lo sintieron los habitantes de zonas de Tenerife. La población comentaba automática­mente en redes sociales la potencia del terremoto y las incidencia­s en sus viviendas, con un amplio periodo de tiempo, mayor que en ocasiones anteriores. La calidad del aire es buena en la totalidad de la isla, siendo aún mejor en las zonas alejadas del entorno de la erupción. Las condicione­s meteorológ­icas son favorables para la dispersión de partículas. El aeropuerto de La Palma continúa operativo. Las coladas han afectado un total de 807,85 hectáreas, de las cuales 245,48 hectáreas correspond­en a cultivos. 139,59 hectáreas son plataneras, 52,94 hectáreas de viñedos y 19,49 hectáreas de aguacatero­s.

Los seísmos más potentes se han producido a más de 30 kilómetros de profundida­d

Las coladas ya han arrasado 807 hectáreas, de las que 245 correspond­en a cultivos agrarios

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EFE A pesar de lo reflejado en la imagen ayer mejoró la calidad del aire de la zona eruptiva

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