El Manga gana al covid: vuelven los «otakus»
El Salón, uno de los más emblemáticos de Barcelona, arranca hasta el lunes
Fenónemo fan: las entradas se agotaron hace días y en prácticamente unos minutos Se han habilitado 70.000 metros cuadrados -casi los mismos que en 2019con más espacio
El Manga de la pospandemia es ya una realidad. Aunque las puertas no abrían hasta las 9:00 horas, ayer antes de las siete de la mañana ya había gente haciendo cola en plaza de España, ansiosa por pisar los varios pabellones de Fira Barcelona destinados a un certamen que el año pasado se celebró íntegramente en línea por la pandemia. Los «otakus» han vuelto.
Y es que ayer arrancó una nueva edición del Salón del Manga, que se prolongará todo el fin de semana largo gasta el lunes después del parón obligado de 2020 por la pandemia. En total, el Manga Barcelona tendrá 70.000 metros cuadrados–frentea los 78.000 de 2019– con algunos cambios en la distribución de espacios: el escenario se ha reubicado en la plaza Univers y los restaurantes también se situarán en otro espacio, y el número de expositores se reducirá hasta el 80%.
Para entrar, los asistentes no deben mostrar el certificado de vacunación, pero sí que deben ir con la mascarilla, excepto en las zonas de restauración, con pequeños puestos y paradas, este mediodía, con largas colas, para poder degustar unos dorayaki, un pastel de taiyaki o un plato de onigiri. De hecho, la organización permite que los asistentes al certamen acudan al punto de vacunación de Fira de Barcelona instalado en el mismo recinto–en el pabellón 4– para estimular la campaña de vacunas entre los más jóvenes.
Fuentes de la organización indicaron a Efe que la apertura se realizó sin ninguna incidencia, con «los accesos muy marcados y ordenados» y con algunas entradas más que se han puesto a la venta a primera hora, después de que las que se pusieron a la venta el pasado día 18 de octubre se agotaran en menos de 24 horas, con picos de venta de 1.500 por minuto. De hecho, se puso a la venta el pasado martes un remanente, generado por incidencias por la saturación de la plataforma de pago y por tickets de compromisos que han quedado libres.
Pese a recuperar totalmente la presencialidad, la organización dispone un canal en la web, donde hay «streamings» y conexiones con Japón –ya que el país nipón no permite la salida de sus expositores para ir a ferias presenciales en el extranjero– y también retransmisiones de algunos eventos.
También hay actos dedicados a la rotulación de cómics, al «shojo» (manga dirigido al público femenino), al anime en catalán o al futuro de la programación televisiva. En el escenario hay «streamers» en directo, conciertos y concursos; también se harán talleres y se podrá pasear por la zona de expositores.
Además, visitarán estos pabellones Wade Otaku y Drawill («Blood Moon»), Eric Cuaresma («SpaceDrum»), Jorge Arranz («Otro Japón») y Marta Coca y José Luis Maravall («Threason»).
Cine, exhibiciones de artes marciales, conciertos y actuaciones diversas completan el programa de esta edición, con un cartel que presenta una ciudad de Barcelona posapocalíptica.
Seguirá por tercer año la colaboración con CineAsia Online y Filmin para la programación cinematográfica en dos ámbitos: las proyecciones en la sala del cine del evento, incluyendo «Belle», de Mamoru Hosoda, que pasó por el último Festival de Sitges (Barcelona), y la programación de Filmin, que acogerá los títulos proyectados y algunos más.
Continuará también la parte gastronómica del evento, con concursosd eco merr amen y« show cook ings» de cocina japonesa; y se estrena una colaboración con Casa Seat, que acogerá tres actividades del salón, incluido un encuentro con los autores de los dos últimos carteles del evento, Carles Dalmau y Laia López. Se actualizará la exposición sobre los 25 años de la feria que se pudo ver en la última exposición presencial, y también habrá un espacio para la cultura coreana y el K-Pop.