El partido de los treinta millones
► El Sevilla se juega ante el Lille su pase a octavos de la Champions, un logro decisivo... para que cuadren la cuentas
Hace justo una semana, se publicaban informaciones exageradas en las que se anunciaba «el partido más importante» del Sevilla, que no era sino una junta general de accionistas en la que el expresidiario José María del Nido anunciaba el derrocamiento de su sucesor, Pepe Castro, con el pretexto de las «cuentas ruinosas» que éste había presentado: 41 millones de euros de déficit. El club no está ni cerca de la bancarrota que anunciaba el racial abogado, desde luego, pero quedar fuera de los octavos de la Liga de Campeones complicaría mucho su panorama financiero.
A partir de esta noche, urge ponerle remedio al arranque tímido, tres empates en la primera vuelta, del Sevilla en la presente Champions. Un triunfo casero sobre el Lille, que tampoco es una hazaña hercúlea, dejaría al equipo de Lopetegui bien encaminado hacia la ronda que alcanzó la temporada pasada... con su consiguiente recompensa económica, uno de los ingresos más importantes del presupuesto sevillista.
La cuenta es sencilla: en la temporada 19/20, saldada con un título en la Europa League, UEFA pagó al Sevilla 36 millones de euros en premios. El curso pasado, tras caer en octavos frente al Borussia Dortmund, se embolsó 71 por su periplo en la máxima competición continental. El auditor de cuentas Luis Giménez puntualiza que «la diferencia no son exactamente 36 millones porque el club ya ha cobrado algún dinero por estar en la fase de grupos y seguirá cobrando por cada punto que sume... pero no nos equivocamos si calculamos que la diferencia entre estar o no en los octavos de final se cifra entre veinticinco y treinta millones».
El mantra que repite Castro, así, para que el Sevilla siga creciendo es que debe «poner el campamento base en la Champions», un torneo que ha jugado en cinco de los ocho ejercicios que ha completado como presidente. Y aquí, para el rey de la Liga Europa, la razón no es deportiva sino económica. Esos 41 millones de déficit que excitaron las ansias golpistas de Del Nido quedarán enjugados, sin necesidad de vender a ninguna de las figuras de Lopetegui, con una clasificación para los cuartos.
A pesar de los tres tristes empates, como los tigres del trabalenguas, de la primera vuelta, el partido contra el Lille no le llega en un mal momento al Sevilla. En casa, los chicos de Lopetegui cuentan por victorias sus comparecencias ligueras, cinco, y el sábado hizo un ejercicio de solvencia frente a Osasuna. Los sevillistas recuperan a un reserva competente como Rekik, lesionado hace dos semanas, y mantienen la duda del goleador En-Nesyri, que se lesionó a finales de septiembre y jugó unos minutillos contra los navarros. Lo más probable es que Rafa Mir mantenga su puesto en el once. Entre otras cosas, porque el domingo hay un derbi...