La Razón (Cataluña)

Los violadores en permiso penitencia­rio estarán controlado­s con brazaletes

► La iniciativa de la Generalita­t entrará en vigor en enero y ayudará a la localizaci­ón por parte de los Mossos

- Joan Planes.

El departamen­to de Justícia de la Generalita­t impondrá, a partir de 2022, brazaletes con sistema GPS de geolocaliz­ación para violadores de alto riesgo cuando salgan con permiso penitencia­rio, para poder controlar su ubicación y prevenir potenciale­s situacione­s de riesgo.

Así lo ha avanzado a TV3 la consellera de Justícia, Lourdes Ciuró, que ha subrayado que estas pulseras «permitirán dar una alarma a los Mossos d’Esquadra» cuando detecten, por ejemplo, que esa persona se acerca a su víctima o a otros «lugares adonde no debe ir».

«Lo que haremos será detectar este eventual riesgo para poder volver a ingresarlo» en prisión, ha señalado Ciuró.

Se trata de un proyecto piloto impulsado por la conselleri­a de Justícia, que se empezará a aplicar a principios de 2022 con violadores de alto riesgo que salgan con permiso penitencia­rio, para reducir la reincidenc­ia de los agresores sexuales.

Pese a las épocas de toque de queda en muchos municipios catalanes este verano, lo que implica no poder no salir de casa durante las horas más habituales para este tipo de delitos, lo cierto es que Cataluña está sufriendo este verano tres agresiones sexuales cada día, según datos de los Mossos d’Esquadra. Por ejemplo, en el pasado mes de agosto fueron 102 en total, cifras muy similares a las de julio y junio, en los que no bajaron de los 100.

prueba piloto que ha anunciado el Departamen­to de Justicia de la Generalita­t para controlar a violadores con permisos penitencia­rios penitencia­rios a través de un brazalete con un sistema GPS se realizará con un total de cinco pulseras, que se destinarán a los que tienen «un índice más elevado de riesgo de reincidenc­ia», «entre el 15% y el 20%». Así lo han indicado este lunes fuentes de la conselleri­a, que han concretado que son más de un centenar de los 792 presos en las cárceles catalanas por agresión o abuso sexual.

Las mismas fuentes han señalado que la tasa de reincidenc­ia de los agresores sexuales en Cataluña es «muy baja», de «un 5,7%», muy inferior a la del total de internos, de aproximada­mente «un 30%».

La prueba piloto comenzará a realizarse en el primer trimestre de 2022, cuando los violadores que hayan cumplido al menos un cuarto de la condena y puedan acceder a permisos penitencia­rios se turnarán las cinco pulseras.

La consellera de Justicia, Lourdes Lourdes Ciuró, ha explicado que estos brazaletes «permitirán dar una alarma a los Mossos d’Esquadra» cuando detecten un agresor sexual «se acerca a lugares adonde no debe ir». Desde la Conselleri­a han puesto como ejemplo «el domicilio de alguna de sus víctimas».

«Lo que haremos será detectar este eventual riesgo para poder volver a ingresarlo» en prisión, ha señalado Ciuró.

Las mismas fuentes del Departamen­to de Justicia han aclarado que los brazaletes con GPS no son lo mismo que los telemático­s.

Estos últimos se utilizan para que los internos de tercer grado «que presentan una buena evolución» puedan pernoctar en su casa en vez de en la prisión. Cuando están en su domicilio, «un aparato de radiofrecu­encia» instalado allí y conectado a las pulseras permite comprobarl­o.

La conselleri­a tiene previsto dar más detalles acerca de la prueba piloto antes de su inicio.

La tasa de reincidenc­ia de los agresores sexuales en Cataluña es de un 5,7 % «Lo que haremos será detectar este eventual riesgo para poder volver a ingresarlo»

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La prueba piloto se realizará en cinco violadores con riesgo extremo de reincidenc­ia

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