Israel estudia permitir un contagio masivo de Ómicron
► Cree que será mejor alcanzar una inmunidad colectiva sin poner restricciones
«La tormenta sucederá. No podemos evitarlo», lo justificaba el primer ministro
Las autoridades sanitarias de Israel estudian permitir un contagio masivo de la población con la variante Ómicron en lugar de poner más restricciones. Con casi 3.000 positivos diarios, el Ministerio de Salud israelí plantea aprovechar la alta tasa de infección por covid para alcanzar una inmunidad colectiva a través de contagios masivos.
El primer ministro israelí, Naftali Bennett, afirmó que Israel está al borde de una «tormenta de infecciones cuya magnitud aún no hemos visto» y advirtió de que «mucha gente se va a infectar», en una entrevista con la emisora pública Kan. «La tormenta sucederá. No podemos evitarlo», explicó, añadiendo que con la variante Ómicron no se puede hacer nada para impedir la subida de contagios. Bennet se encuentra confinado después de que una de sus hijas diera positivo con la variante originada en Suráfrica.
La tasa de positividad ha subisuperior do en el país al 2,48 por ciento y el ratio de infección se ha disparado al 1,53, lo que indica que el brote se está intensificando. Hace una semana, se confirmó que Israel implantará la cuarta dosis contra el coronavirus a mayores de 60 y sanitarios. «Esta es una noticia maravillosa que nos ayudará a atravesar la variante Ómicron que está envolviendo al mundo», señalaba Bennett.
Varios países de Europa están notificando cifras récord de covid-19 por esta nueva cepa, que ha obligado a las autoridades sanitarias a implantar cuarentenas, toques de queda o confinamientos.
En el continente americano los casos han aumentado un 50% en los últimos siete días, mientras que las muertes se han incrementado un 11%, según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Durante el periodo comprendido entre 19 y el 25 de este mes, más de la mitad de los países y territorios de la región comunicaron un incremento de casos al 20%. La variante Ómicron se notificó en 27 países y territorios de América en la última semana.
Las tres naciones que reportaron un mayor número de nuevos casos fueron Estados Unidos, Canadá y Argentina. La situación en América Central es «de aparente tranquilidad», según la OPS, ya que no se notificó un aumento de casos.
En África, el ritmo de contagios se ha acelerado. El continente supera los 9,5 millones de casos y las 227.000 muertes, cuando todavía los porcentajes de vacunación siguen muy bajos.
En Oceanía, la tónica han sido las restricciones severas. Australia, que ha registrado más de 270.000 contagios y cerca de 2.200 muertes, se vio obligada a imponer restricciones en verano tras controlar durante varios meses la expansión del coronavirus. Nueva Zelanda, que impuso un confinamiento muy estricto, declaró el país libre de coronavirus el verano de 2020 y lo volvió a conseguir en diciembre tras controlar sus brotes activos.
En China, origen de la pandemia, las autoridades de la ciudad china de Xian (noroeste), con 13 millones de habitantes, han empezado a entregar alimentos a domicilio a la población después de que se decretara un confinamiento total.