Plataformas solidarias para relanzar la isla de La Palma
► Son proyectos que pretenden dar voz a los damnificados por el volcán de Cumbre Vieja
«Revivir El Valle» es el nombre del proyecto de intervención comunitaria para la resiliencia social que ha sido promovido por el Área de Participación Ciudadana del Cabildo de La Palma, que dirige Nieves Rosa Arroyo, con la financiación del Gobierno de Canarias y el apoyo de los ayuntamientos de Los Llanos de Aridane, El Paso y Tazacorte, más el acompañamiento de la Universidad de La Laguna.
Arroyo explica que los objetivos y líneas de acción de este proyecto se dirigen a promover la participación de la ciudadanía en aquellos aspectos que tienen que ver con la búsqueda de soluciones a la crisis derivada de la erupción volcánica de Cumbre Vieja. Propone el impulso de acciones coordinadas que favorezcan el acceso a una información rigurosa, útil y que propicie la mejor gestión posible de la situación excepcional existente en La Palma, así como el establecimiento de mecanismos estructurados de escucha a la comunidad.
Una de las peticiones de los vecinos afectados por la erupción volcánica es la necesidad urgente de «tener voz» de cara a la recuperación de la zona. La incertidumbre de dejar todo en manos de la administración no genera tranquilidad y seguridad para los damnificados. A través de esta plataforma «podemos ser escuchados, plantear alternativas y posibles soluciones y, de alguna forma, trasladar desde una posición de sufridores en primera persona nuestras necesidades», asegura un vecino. No solo basta con sentarse a mirar cómo emplean el dinero de las donaciones para la recuperación de la isla, los afectados quieren participar en la toma de decisiones.
La responsable del Área asegura que ya se trabaja en un proyecto de escucha ciudadana desde principios de octubre, apenas un par de semanas después de que la erupción y el terror comenzara a sembrarse en La Palma. «Es un proyecto elaborado por profesionales profesionales de la participación ciudadana y cuenta con el respaldo de todos los ayuntamientos afectados por la erupción», explica Arroyo. La consejera asegura que no solo se trata de una iniciativa destinada a escuchar a aquellos que lo necesitan, sino que también «vamos a cuidar de ellos», con la finalidad de una buena reconstrucción del Valle de Aridane.
«La importancia de encontrarnos en una democracia participativa transgrede en que tenemos que escuchar todas las peticiones de la ciudadanía e intentar cumplirlas y llevarlas a cabo siempre, para que nos hagan propuestas y después, nosotros, como representantes públicos y bajo la normativa legal, tomar las decisiones oportunas», añade la consejera. Así, «Revivir El Valle» es una apuesta arriesgada por «hacer las cosas bien». Una oportunidad para dejar de lado los intereses políticos y personales y focalizar toda la atención en las exigencias y necesidades de las personas que peor están viviendo estos acontecimientos. «Lo peor que podría pasar es que cada uno, en relación a las fuerzas políticas, fueran cada una por su lado», añade. La importancia de los trabajos que se están efectuando ahora se basan principalmente en el trabajo coordinado y unitario que las administraciones llevan promoviendo desde el primer momento.
Entre las iniciativas que se han visto estos días en la isla está de impulsada por el chef José Andrés: «Mi nombre es La Palma», de promoción de productos del valle afectado por el volcán.