Cuarentena en las aulas cuando haya cinco niños infectados
► Salud Pública aprueba este cambio a 48 horas de la vuelta al colegio
La Comisión de Salud Pública, formada por representantes del ministerio de Sanidad y las autonomías, acordó ayer no hacer cuarentenas del aula completa cuando haya hasta 4 positivos contagiados o menos del 20% de los alumnos, con el objetivo de garantizar la presencialidad. De este modo, se recomienda cuarentena para todo el grupo siempre que se den 5 casos o más de infección activa en un aula o afectación del 20% o más de los alumnos de la clase en un periodo igual o inferior a 7 días, según informó Sanidad. Se trata de una adaptación de las Medidas de Prevención frente a Covid-19 en centros educativos y de la Guía de Actuación ante la Aparición de Casos de Covid-19 en centros educativos.
Esta medida, que llega a 48 horas de que se reanuden las clases, «busca garantizar y fomentar lo máximo posible la presencialidad en todos los niveles educativos, reforzando el cumplimiento de las medidas de prevención», según señala el comunicado del ministerio. Además, a su juicio, «se adapta a la situación pandémica actual, refleja el importante avance de la vacunación en todos los grupos de edad y tiene en cuenta que los entornos escolares han demostrado a lo largo de la pandemia ser seguros en cuanto a la transmisión del virus».
Diversas regiones, como Madrid, Galicia y Andalucía, ya se habían adelantado a la decisón de la Comisión, anunciando que no exigirían cuarentenas de aulas completas cuando se registren casos positivos de alumnos en grupos burbuja.
Y es que las cuarentenas han supuesto un gran problema de conciliación familiar y laboral a miles de familias. Hasta ahora, los alumnos debían aislarse durante 10 días en cuanto había un caso positivo en el aula si no estaban vacunados.
Los expertos apoyan esta medida, pero piden vigilar a los niños sintomáticos, dado que lo contrario puede hacer aumentar los contagios en el interior de los colegios. Lo que queda pendiente ahora es definir qué se hace con los que presenten síntomas tras un positivo de un compañero, es decir, si se establece una vigilancia de los síntomas y si tienen la obligación de realizarse un test diagnóstico o no.