Bruselas no ve motivos para que se realicen «vuelos fantasma»
► Asegura que la normativa de «slots» protege ahora con suficiencia a las compañías
La Comisión Europea no realizará cambios en su normativa de «slots», ya que considera que ésta es lo suficientemente flexible y evita los conocidos como «vuelos fantasma», aquellos trayectos sin pasajeros que las aerolíneas se vieron obligadas a realizar a principios de la pandemia para no perder sus derechos de vuelo. «Para la Comisión, los vuelos vacíos son malos para la economía y el medioambiente y por eso ha tomado medidas desde el inicio de la pandemia», aseguró ayer el portavoz de Transporte de la Comisión Europea, Stefan de Keersmaecker, en respuesta a las acusaciones realizadas por la aerolínea alemana Lufthansa y su filial belga Brussels Airlines, que asegura que tendrá que operar 18.000 «vuelos fantasma» en invierno para no perder sus «slots» por la caída de la demanda.
En circunstancia normales, las aerolíneas del espacio europeo deben utilizar el 80% de los derechos de vuelo asignados para poder mantener al año siguiente las mismas franjas horarias, «slots» tal y como se denominan en la jerga del sector. Ante la caída en picado de los vuelos durante los primeros meses de la pandemia, las compañías aéreas se vieron obligadas a programar vuelos sin pasajeros, con las consiguientes pérdidas económicas y repercusiones para el medioambiente.
Al poco de estallar la pandemia, el Ejecutivo comunitario redujo este porcentaje al 50% y, además, introdujo una cláusula de flexibilidad que permite la cancelación de hasta el 100% de los vuelos en determinadas rutas si una nueva variante volvía a imponer severas restricciones a los desplazamientos. Según explican fuentes diplomáticas, una vez finalizan estas limitaciones, las compañías tienen hasta seis semanas adicionales para poder adaptarse a la situación y que los pasajeros vuelvan a reservar vuelos. Estas mismas fuentes aseguran que esta clausula de flexibilidad se ha utilizado en rutas de Austria, Holanda, Suiza y Reino Unido además de otros países como China, Marruecos, Israel, Japón, Canadá y Turquía.
A pesar de las quejas de Lufthansa, Bruselas espera un aumento de los vuelos este invierno respecto a 2022 y por eso espera elevar al 64% el porcentaje de slots desde el 50% actual a partir del 28 de marzo, cuando da comienzo la temporada veraniega. Fuentes diplomáticas no ocultan el malestar respecto a las acusaciones de la aerolínea alemana y creen que estas declaraciones sólo persiguen cambios en su política comercial para operar con menos vuelos y más pasajeros en las aeronaves.
La Comisión no es la única que se ha pronunciado contra la práctica de Lufthansa. El miércoles, Ryanair aseguró que la compañía alemana sólo está realizando estos vuelos para proteger sus «slots» y que tendría una forma muy sencilla de atraer más viajeros para no tener que hacerlo: rebajar el precio de los billetes. Con ello, añadió su consejero delegado, Michael O’Leary, recompensaría además a los ciudadanos que, según dijo, han pagado en parte los 12.000 millones de euros con los que ha sido rescatado el grupo.
La organización internacional de aeropuertos (ACI) también se expresó en contra de los «vuelos fantasma». ACI aseguró, en línea con lo expresado ayer por la Comisión Europea, que la cláusula de flexibilidad da el suficiente margen a las aerolíneas para poder adaptarse a las oleadas del coronavirus.
La Comisión Europea no introducirá cambios en la regulación y niega la caída de actividad