Joyce Carol Oates, el terror gótico en toda su plenitud
► La novelista publica dos espléndidos relatos sobre las relaciones tóxicas y sus consecuencias en el seno de las parejas
notable voz literaria que caracteriza a Oates indaga en las experiencias psicológicas de las víctimas a través de dos relatos, no de misterio, sino de pánico gótico. Para ello se sirve del arquetipo paterno con el fin de explorar lo que podrían llegar a hacer, o a no hacer, para proteger a sus hijos. En primer lugar conoceremos a Clare Seidel, una treintañera historiadora del arte, adoptada de niña, que jamás ha sentido curiosidad por su familia biológica hasta que recibe la llamada de un abogado de la ficticia ciudad de Cardiff, en Maine, informándole de que una abuela paterna de la que nunca ha oído hablar ha fallecido legándola una propiedad.
Cuando se desplaza hasta la escarpada localidad, descubrirá a unos tíos excéntricos que no responden a los motivos por los que fue dada en adopción pero sí conocerá la aterradora pesadilla que vivió su familia biológica. ¿Qué sucedió la noche en que murieron sus padres y hermanos? La resolución puede dejar frustrados a algunos lectores, pero otros aceptarán la ambigüedad como única salida. «El hijo superviviente», lasegunda novela corta, es una versión sobre la vida y la muerte de una poeta radical conocida como NK –revisitación de Sylvia Plath y su pareja Ted Hughes–. La historia arranca años después del suicidio y filicidio que terminó con su vida y la de su hija, dejando con vida a su pequeño. Contado desde la voz de Elisabeth (Assia Wevill), la seLa gunda esposa del viudo, nos adentra en una retorcida relación de patriarcado tóxico. En ambas historias hay sugerencias de elementos sobrenaturales, momentos en los que nos cuestionamos qué es real y qué imaginado.
Lo real y lo imaginado
Al tiempo, se centran en el trauma y en la denodada búsqueda de adquirir el control de la realidad... porque las vidas de las mujeres, todavía, están fiscalizadas por presiones sociales, obligaciones y cierto tipo de hombres. Y asistiremos con el corazón en un puño al desconcierto de Clare y al lento desafío de Elisabeth. Las dudas de la primera y el terror de la segunda.
Un libro brillante en el que los secretos familiares se convierten en pesadillas. Un famoso koan se pregunta cómo suena el aplauso que se realiza con una sola mano... quizá el paralelismo con esta crítica sería la celebración silenciosa de esta embriagadora pesadilla.