Iglesias revela que tiene acceso a datos de los sondeos del CIS
► El PP y Ciudadanos exigen al Gobierno explicaciones y la dimisión de Tezanos
Se fue del Gobierno y de la política, pero sigue teniendo acceso a datos que en su nueva condición de «un ciudadano más» no debería tener. Y lo ha contado él mismo. El exvicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias, publicaba ayer, a primera hora de la mañana un mensaje con el que dejaba claro que seguía actuando como si fuera un dirigente político.
El exlíder de Podemos confundió el destinatario del mensaje que quería trasladar –a todas luces a algún de sus correligionarios–y reveló en su canal público de la red de mensajería de Telegram los datos que el sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas otorgaría a su partido en un barómetro que publicaría tan solo unas horas más tarde y que, además, confirmaban con exactitud los datos aportados ayer a primera hora por el ex vicepresidente.
Unos datos que, sobra decir, son reservados y que resulta extraño que ahora, tras salir de la política, pueda tener acceso a ellos. A las 08:04 minutos de la mañana, aseguraba que la encuesta les daba «entre tres y cinco escaños. Un 11% en Valladolid». Iglesias daba cierta credibilidad a la encuesta porque «la muestra es muy grande», en concreto se extendía a 7.000 personas, detallaba. Así, transmitía a su receptor que estos datos le proporcionaban «buenas sensaciones». Aún así, el ex vicepresidente sí reconocía que no se fiaba al 100% de estos datos porque «la cocina vete a saber y ya sabes que el CIS es raro, pero son los que más recursos tienen». Todo un golpe bajo a José Félix Tezanos, director del CIS, siempre rodeado de polémica por el tratamiento de sus encuestas.
Este mensaje de victoria era borrado tan solo tres mensajes después. Sin embargo, a las 08:07h este mensaje ya había sido visionado por hasta ochenta suscriptores, como puede comprobarse en el pantallazo a la derecha de esta columna, captado por LA RAZÓN. Tras el borrado del mensaje, Iglesias trató de desviar la atención ante la relevancia del comentario mandado minutos antes «¿Quién no ha mandado un privado al canal?, se preguntaba. Era ya tarde para tratar de enmendar su error. En apenas cuatro minutos el ex vicepresidente revelaba que seguía conociendo los datos de una institución pública y reconocía que el CIS utilizaba su polémica «cocina», a pesar de que su propio partido – cuando él todavía estaba en el Gobierno–aceptó la renovación del contrato de José Félix Tezanos, a pesar de que él mismo y su formación exigían su dimisión en 2019.
Ante la noticia adelantada por este diario, las reacciones políticas no tardaron en sucederse. El Partido Popular reclamó de inmediato la dimisión del presidente del CIS. Fue la portavoz del Grupo Popular en la Cámara Baja quien manifestó la decisión del partido. «Solo cabe una salida: que quien dirige el CIS dimita y si no dimite pues volveremos a instar una comisión de investigación», según explicó a Efe, para averiguar cómo es posible que Iglesias haya tenido acceso a esos datos reservados, así como para depurar responsabilidades. Desde el PP consideran que este «escándalo» muestra que «el CIS está al servicio de PSOE y Podemos» porque «si Pablo Iglesias tiene los datos es porque el CIS se los ha facilitado».
A juicio del PP, lo ocurrido confirma que desde la llegada de Pedro Sánchez al Ejecutivo, los instrumentos al servicio del interés general se usan en beneficio particular «y al servicio de un proyecto político».
Desde el Grupo Mixto, su diputado Pablo Cambronero, también activó la vía parlamentaria para denunciar este asunto. Lo hizo registrando una pregunta parlamentaria en el Congreso para obligar al Gobierno que conteste sobre si Iglesias «tiene acceso privilegiado al CIS», al considerar «extremadamente grave» la situación. Desde Ciudadanos también exigieron explicaciones al Gobierno así como la dimisión «inmediata» del presidente del CIS.
La reacción por parte del ex líder morado fue la de felicitarse por los datos avanzados por Iglesias. «Refleja lo que perciben en la calle» y que pueden ser «determinantes», aseguró el candidato morado en Castilla y León, Pablo Fernández.
La encuesta publicada ayer por el CIS, a parte de la polémica generada, es el único de los sondeos que da la victoria al PSOE aunque con unas amplias horquillas que dejan abierto el panorama de acuerdos postelectorales.