Suiza, Suecia y Filandia superan su histórica neutralidad
► Berna se suma a las sanciones de la UE contra Rusia, mientras que Estocolmo y Helsinki se plantean ingresar en la OTAN
La cruenta invasión de Ucrania por Rusia está haciendo saltar por los aires algunos de los dogmas de la política internacional. Países históricamente neutrales como Suecia, Dinamarca o Finlandia han anunciado en los últimos días el envío de armas a Kiev y Suiza, el país que siempre se pone de perfil ante todos los conflictos por muy sangrientos que estos sean, decidió ayer unirse a la batería de sanciones impuestas por los países europeos contra el régimen de Vladimir Putin. El Gobierno suizo aseguró ayer su disposición a aplicar «plenamente» los castigos acordados por los Veintisiete, lo que significa que congelará los activos de Putin, el primer ministro; Mijaíl Michoustine; el ministro de Asuntos Exteriores, Seguei Lavrov; y otros miembros del gabinete. Además, cinco oligarcas del círculo de Putin y con vínculos en las finanzas suizas y las materias primas dejaran de poder entrar en el país.
Según aseguró ayer el presidente presidente de Suiza, Ignazio Cassis, la operación militar contra Kiev es «inaceptable desde el punto de vista del derecho internacional, de la política y de la moral». Se trata de un paso de gigante para un país conocido por su laxitud fiscal que nunca ha tenido remilgos en guardar a buen recaudo las fortunas de delincuentes corruptos y dictadores sanguinarios e incluso ha servido de caja fuerte para bandos enfrentados. «Daremos este paso con convicción, después de haber reflexionado y de manera inequívoca», señaló Cassis.
Se espera que estas sanciones entren en vigor de manera inmediata y podrían ser tan solo el principio. De momento, el bloqueo de estos activos están circunscrito a cuentas particulares, pero existe la posibilidad de extender los castigos a las entidades financieras.
Dentro de las consecuencias inesperadas que está teniendo la invasión de Ucrania, también se ha acelerado el debate en Finlandia y Suecia sobre su adhesión a la OTAN. Hasta ahora, los dos países eran considerados aliados estrechos, pero no miembros. Aunque Putin ha amenazado con una operación militar si los dos Estados deciden entrar en la Alianza parece que sus negros presagios no han conseguido amilanar ni a Helsinki ni a Estocolmo. Según la última encuesta publicada en Suecia el viernes, el apoyo a la entrada a la Alianza nunca ha sido tan alto (40% de la población a favor).
Los partidos políticos finlandeses discutirán el ataque de Rusia a Ucrania y la posible membresía de Finlandia en la OTAN hoy, dijo a los periodistas la primera ministra finlandesa, Sanna Marin.