Argelia avisa: Marruecos exigirá las ciudades autónomas
Argelia ya mostró su sorpresa e indignación tras conocerse el apoyo de España al plan marroquí de autonomía para el Sáhara y ayer volvió a pronunciarse. Y es que desde Argel consideran que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «no consiguió nada» de lo que buscaba en Marruecos en materia de integridad territorial y estima que, «tarde o temprano», el reino alauí «volverá a la carga» con sus tradicionales reivindicaciones de soberanía, según asegura un alto cargo argelino citado por el portal «Tout sur l’Algerie».
En concreto, apunta que, entre las «pocas medidas» contempladas en la declaración conjunta al término de la reunión entre Sánchez y el rey de Marruecos, Mohamed VI, no está algo que sí entraba en los «cálculos estratégicos» del Gobierno español: Ceuta y Melilla. «En este punto decisivo no consiguió nada», sentenció.
Según este alto cargo, la parte marroquí no ha admitido ninguna alusión –«ni implícita»– a la integridad territorial española, lo que demostraría que Sánchez «vendió el alma por un plato de lentejas» y Marruecos «volverá a la carga tarde o temprano» para reividincar algo que considera tan «causa nacional» como el Sáhara Occidental. Además, vaticinó que Marruecos seguirá utilizando las «palancas» que durante años ha hecho valer como «intimidación» y «chantaje», entre ellas la migración, el narcotráfico, la seguridad y la «asfixia económica y comercial» de Ceuta y Melilla.
Visita «precipitada»
Este alto cargo considera que fue muy «precipitada» la visita de Sánchez, al que considera «aislado» en el ámbito político interno tras una decisión de política exterior que Argel atribuye a un puñado de personas, entre las que figura «un exjefe de Gobierno» socialista, José Luis Rodríguez
Zapatero, y «un exministro de Asuntos Exteriores», Miguel Ángel Moratinos.
El Rey marroquí, Mohamed VI, habría querido lanzar un «salvavidas» a un Sánchez que teme ahora, y «con razón», apunta, decisiones «dolorosas» que «probablemente» tomará Argelia. Para este último país, la decisión de España de reconocer el plan de autonomía marroquí sobre el Sáhara Occidental fue una «traición» y este malestar ya se tradujo en la llamada a consultas del embajador.
Al respecto, el alto cargo argelino dejó claro que la llamada a consultas del embajador es solamente el primer paso de otras consecuencias que «serán perceptibles a distintos niveles, a corto y medio plazo». De hecho, la empresa argelina Sonatrach ya advirtió recientemente de que «recalcularía» el precio del gas enviado a España.