La Audiencia condena al PP por beneficiarse de Gürtel en Boadilla
► Pena de 36 años de cárcel para el exalcalde González Panero por amañar adjudicaciones
LosLos amaños de adjudicaciones de la «trama Gürtel» en Boadilla del Monte (Madrid) entre 2001 y 2009 le han acarreado al PP una nueva condena como partícipe a título lucrativo por haberse beneficiado de 204.198 euros, desconociendo su origen ilícito, que se utilizaron en diferentes gastos electorales del partido en el municipio madrileño en las campañas de 2003 y 2007. En esa sentencia, la Audiencia Nacional condena a penas de tres meses a 36 años de prisión a 23 integrantes de la red corrupta por la adjudicación de contratos a empresas de Francisco Correa a cambio de comisiones, una parte de las cuales se destinó «al pago de facturas para actos, eventos y gastos» electorales de las referidas campañas municipales de los populares. Se trata de la tercera condena del tribunal al PP por este motivo tras las que impuso a la formación en la sentencias de la pieza principal del «caso Gürtel» y de las obras de reforma en la sede de Génova que fueron pagadas con dinero negro.
La Sala –presidida por el magistrado José Antonio Mora e integrada además por José Ricardo de Prada y María Dolores Hernández Rueda– impone la pena más alta, 36 años de prisión, al exalcalde de Boadilla Arturo González Panero, «el Albondiguilla », a quien condena por 18 delitos, entre ellos asociaciónilícita, cohecho, prevarica ción, fraude a las administraciones, malversación, blanqueo y tráfico de influencias. Además, deberá pagar multas que suman seis millones y medio de euros. Aunque 16 de los condenados reconocieron los hechos, por lo que la Sala les aplica la atenuante de confesión, en el caso de González Panero rechaza que su declaración en el juicio fuese relevante para aplicarle esa atenuante ni la de reparación del daño debido al «nulo esfuerzo realizado por él para hacer frente» a esos perjuicios perjuicios económicos causados por su comportamiento.
Los magistrados destacan la «especial relevancia en la ejecución de los hechos» de González Panero en su condición de alcalde del municipio madrileño. «No era un funcionario más, sino la cabeza del Consistorio durante dos legislativas», asegura antes de subrayar «la defraudación de la confianza depositada» en él como regidor, «que utilizó para su propio enriquecimiento personal».
En cuanto al PP, en la sentencia se deja claro que «el beneficio para el Partido Popular es evidente» por los pagos que efectuó el Grupo Correa en concepto de comisiones para conseguir adjudicaciones y que fueron destinados en la cantidad referida «al sostenimiento de la propia organización», suponiendo «correlativamente un menor gasto para el partido, ya fuera campañas, precampañas o el sostenimiento del propio partido en Boadilla», lo que se tradujo «en un menor gasto» para la formación. Ahora, el PP deberá devolver esa cantidad de la que se benefició para costear gastos electorales.
Fue a través de Correa –condenado a trece años y medio de prisión, como su lugarteniente Pablo Crespo–, explica el tribunal, como «se llegó contactar e introducir en la dinámica comisiva a los responsables públicos de las Administraciones que sirvieron para el enriquecimiento de sus miembros», como reconocieron el propio González Panero, Crespo y el exresponsable de la empresa municipal de Vivienda Tomás Martín Morales, que ha sido condenado a seis años de cárcel.
El tribunal ha condenado a cuatro años de prisión al exdiputado del PP en Madrid Alfonso Bosch y a un año y medio de cárcel al excontable de la trama José Luis Izquierdo. Además, impone penas inferiores a dos años de reclusión a los empresarios Alfonso García-Pozuelo, José Luis Ulibarri, José Luis Martínez Parra, Rafael Martínez Molinero y Jacobo Gordon, exsocio de Alejandro Agag. La Sala absuelve a María del Carmen García Moreno al haberse retirado las acusaciones contra ella, y a Francisco Pastor por no apreciar indicios suficientes de su intervención en la trama.
La resolución parte de la dinámica descrita en la sentencia por la primera época de la trama Gürtel sobre la actividad desarrollada por Correa y su grupo de empresas «para el enriquecimiento personal y de sus miembros a costa de las administraciones públicas».
El relato de hechos probados constata aproximadamente desde 1999 Correa lideró un entramado societario y personal «con la finalidad de enriquecerse a sí mismo y a quienes formaban parte de la trama, además de procurar financiación irregular al Partido Popular a través de fondos ilícitos provenientes de las conductas delictivas» llevadas a cabo en el Ayuntamiento de Boadilla cuando «estuvo controlado» por el PP.
Correa es condenado a trece años y medio de prisión tras su confesión admitiendo los hechos