Brooklyn y Nicola: una boda de 3 millones Fran Gómez.
► El hijo de los Beckham se casó ayer con la benjamina de Nelson Peltz, un importante empresario estadounidense
AyerAyer pasó por la soleada costa de Palm Beach, en Florida, una caudalosa lluvia de estrellas que inundó el pequeño pueblo de glamur y elegancia. La boda de Brooklyn Beckham y Nicola Peltz reunió a la crème de la crème de la sociedad británica y estadounidense, consagrándose como el evento del año que incluso habría desplazado a cualquier boda real. La celebración comenzó en la víspera de las nupcias, con una lujosa cena bajo la puesta del sol en la que se dejaron ver rostros muy conocidos, como Serena Williams, el chef Gordon Ramsay o la actriz Eva Longoria, que se decantó por un espectacular vestido largo en color salmón, que realzaba su moreno natural.
Tanto la fiesta de preboda como el enlace se celebraron en la mansión de la familia de la novia, una espectacular propiedad que se adquirió en el año 2015 y que no escatima en todo tipo de detalles. Se trata de un inmueble valorado en 90 millones de euros que cuenta con la friolera de 27 habitaciones, privilegiadas vistas al mar, 125 metros de playa privada y otros tantos de vastos terrenos que rodean la vivienda y que aseguran la privacidad de los inquilinos. Tan grande es la edificación que Nelson Peltz, el padre de la novia, utiliza un carrito de minigolf para desplazarse por su casa.
El empresario es uno de los multimillonarios más conocidos de Estados Unidos, y su fortuna se estima, según la revista «Forbes», en 1.700 millones de dólares. El origen de su riqueza se remonta al fondo de inversión Train Fund Management, del que él fue uno de los fundadores. Desde entonces, y a lo largo de su trayectoria en las finanzas, se ha codeado con las personalidades más importantes e influyentes del país, incluido el expresidente Donald Trump. Teniendo en cuenta esta selecta red de contactos, no es de extrañar que en la boda de su hija se dejaran ver los más acaudalados de la nación norteamericana.
Lo mismo sucede en el caso de la familia del novio. Victoria y David
Beckham no necesitan presentación,ysonmuchaslascelebridades que acudieron al enlace de parte del exfutbolista y la diseñadora de moda. Entre los más destacados se encuentran Gigi Hadid, Nicole Richie, Phil Neville, quien fuera jugador del Manchester United; Tom Brady, el quarterback de los Tampa Bay Buccaneers; o la supermodelo Gisele Bündchen. Tampoco se perdieron las nupcias de Brooklyn y Nicola algunas exintegrantes de las Spice Girls, el grupo de música femenino que encumbró a la fama la madre del novio en la década de los años noventa.
Sin embargo, pese a este aluvión de rostros VIP y grandes fortunas, resulta evidente que fueron Brooklyn y Nicola los grandes protagonistas de la boda. Los dos presumieron de amor ante centenares de invitados, en unas fastuosas nupcias cuyo coste superó los tres millones de euros.
Los tortolitos se conocieron en 2016, en el conocido Festival de Coachella Valley, pero el amor entre ellos no surgió hasta un tiempo
después. Fue en julio de hace dos años cuando el hijo de David Beckham organizó una pedida de mano sorpresa a su pareja, invitando a Nueva York a parte de su familia para que todos fueran testigos del dulce momento que les llevó hasta la boda de ayer.
Nicola recorrió el camino hasta el altar vestida de Valentino, luciendo un diseño exclusivo que la firma preparó para ella y con su colaboración. De hecho, se presentó en varias ocasiones en su atelier de Roma, acompañada de su madre y su hermano Brad –su padrino– para elegir ella misma las telas y los detalles que darían vida al traje de novia de sus sueños.
Pero, como suele ser habitual en las bodas de la jet set, Nicola no vistió un único diseño a lo largo de la celebración. Las fuertes medidas de seguridad y el hermetismo que rodeó al enlace no permitieron que se filtraran muchos detalles acerca de la fiesta, pero se conoce que la novia se cambió de ropa, y se baraja la posibilidad de que uno de los atuendos que escogió podría llevar la firma de su recién estrenada suegra, Victoria Beckham, que lanzó su propia firma de moda en el año 2007, tras despedirse para siempre de su carrera musical.
Aunque en un principio se pensó que ella y el resto de las Spice Girls podrían amenizar con sus canciones la celebración posterior a la boda, finalmente fue Snoop Dogg quien actuó en directo para poner la guinda a unas nupcias que, de seguro, sus invitados no olvidarán jamás.