Elon Musk quiere pelea con Putin

Diario de un viejo que le grita al televisor

Elon Musk, el rico más rico del mundo, ha retado a duelo a Vladimir Putin. La muestra de valor queda devaluada por la escasa probabilidad del suceso: el autócrata ruso está ahora muy ocupado dirigiendo la invasión a Ucrania y eso deja poco tiempo a las florituras de florete. El supermillonario escribió en Twitter: «Por la presente desafío a Vladimir Putin a un duelo. Lo que está en juego es Ucrania». No aclaró con qué armas. Como Elon es dueño de SpaceX y fan de «Star Wars», me imagino que él elegiría la espada láser y el ruso la pistola con balas de polonio. Y en ese hipotético duelo, ¿el ganador se quedaría con Ucrania o qué? ¿Sería a primera sangre y por la paz? Cuentan que, por si acaso, Zapatero ya se habría ofrecido como mediador o padrino de cualquiera de los dos.

Además de sus afanes duelistas, Elon está interesado en otras cuestiones. Por la baja natalidad mundial, por ejemplo. Tampoco aclara qué puede hacer él por aumentar los nacimientos. ¿Crear una gran empresa clandestina para agujerear toda la producción de Durex? ¿Desarrollar en sus laboratorios de Silicon Valley un «Satisfyer» que, además de proporcionar gustirrinín, al mismo tiempo deje embarazadas a las usuarias? ¿Elevar al macho latino ardiente, tipo

Pedro Sánchez, a la categoría de héroe de Marvel?

Mientras, Amancio Ortega ha bajado al puesto 23 en la lista de los más ricos del mundo de Forbes. Él ni se inmuta, pero Tamara Falcó y Victoria

Federica de Marichalar parecen dispuestas a montar mesas petitorias en todas las tiendas de Zara para devolver al gran Amancio al lugar que le corresponde y pueda hacer una oferta por el Kremlin. Convertir a Vladimir Putin en inquilino quizá le bajaría los humos.