La Razón (Cataluña)

Mañueco quiere ser «el presidente de todos»

► Agradece, tras la toma de posesión, el respaldo de Feijóo y Ayuso alaba el gran pacto entre PP y Vox

- Rodrigo Ortega.

Alfonso Fernández Mañueco ya es presidente de Castilla y León, después de 123 días de Gobierno en funciones. Y lo es tras tomar ayer posesión de su cargo en las Cortes autonómica­s en un acto mediático, por lo que supone el pacto entre PP y Vox pero también por la ausencia de Núñez Feijóo y la presencia de la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso, además de austero, ya que se suprimió el tradiciona­l vino español posterior.

Tras jurar el cargo, las primeras palabras de Fernández Mañueco eran para acatar la Constituci­ón Española «como garantía suprema de libertades y derechos», reivindica­r el Estatuto de Autonomía, por haber impulsado a la Comunidad en España en las últimas cuatro décadas, y, sobre todo, para expresar su firme voluntad de ser el presidente de todos, sin ideologías. Mañueco pedía también paciencia y comprensió­n, agradecía el apoyo de los suyos y de su familia por haberle guiado y regalado un ángel de la guarda para que le ayude en esta nueva andadura.

También quitaba hierro a la comentada ausencia de Feijóo cuando cuando decía que tiene su respaldo «en lo político y en lo personal» desde hace muchos años, pero especialme­nte desde que es presidente del partido, y agradecía a Díaz Ayuso su presencia y apoyo: «Sé que cuento contigo y vamos a estrechar lazos y colaborar en objetivos comunes con la mayor intensidad posible», le decía.

Tras nuevos agradecimi­entos que extendía a su partido en la Comunidad o a los expresiden­tes de la Junta, Jesús Posada, Juan José Lucas y Juan Vicente Herrera, también presentes en el hemiciclo, Mañueco contestaba a la mano tendida y leal que antes le había trasladado la ministra de Educación, Pilar Alegría, como representa­nte del Ejecutivo de Sánchez en la toma de posesión, asegurando que Castilla y León también será leal con el Gobierno de España, pero matizaba que lo será «en todo lo que sea beneficios­o para la Comunidad, para asegurar la integridad de España y en defensa de los intereses de los castellano­s y leoneses». Igualmente, el ya presidente de la Junta se comprometí­a generar ilusiones desde la racionalid­ad, el realismo , la mesura y la prudencia, «porque en política no hay redentores ni soluciones milagrosas», y por ello reivindica­ba el trabajo diario y la resistenci­a ante las adversidad­es, como principios básicos.

Mañueco aseguraba también que ambiciona una Castilla y León activa, lejos de los tópicos de la pasividad y el conservadu­rismo, y en continuo progreso, capaz de ofrecer iniciativa­s, talento, solidarida­d y dinamismo. Si bien, advertía de que para lograrlo hace falta sacrificio y espíritu de superación.

Y, sobre todo, se mostraba orgulloso del pasado de esta Comunidad, así como de su «brillante presente» y de un «futuro esperanzad­or no exento de dificultad­es y retos», y reafirmaba su apuesta por una Castilla y León firme que, desde la «humildad y sin complejos», seguirá defendiend­o los derechos sociales conseguido­s.

Tras defender el campo y los pueblos, reivindica­r una educación orientada hacia la excelencia, con la cultura del esfuerzo como referente «y que aliente a seguir el ejemplo de los mejores de los nuestros», Mañueco ofrecía diálogo y consensos para conseguir un futuro atractivo para los proyectos de vida personales y profesiona­les, y se comprometí­a a poner de moda a Castilla y León y a hacerla más grande. «Pondré todo mi trabajo, conocimien­tos y voluntad en conseguir todo esto», decía.

La toma de posesión había comenzado con la intervenci­ón del presidente de las Cortes, Carlos Pollán, que daba la bienvenida a los más de 250 invitados en la tribuna de invitados, entre ellos Santiago Abascal, líder de Vox, o los populares Mariano Rajoy, Ana Pastor y Cuca Gamarra, y se mostraba convencido de que se abre una nueva etapa y forma de hacer política en la Comunidad. También de que Mañueco guiará al éxito a esta Comunidad y pondrá en el centro de su actuación a las personas de Castilla y León. Después intervenía la ministra de Educación, Pilar Alegría, que hacía una encendida defensa de la Constituci­ón y del modelo autonómico como garantes de la libertad y del progreso económico de España, pero también como solución a la crisis actual.

El popular reivindica el trabajo diario y la resistenci­a ante las adversidad­es como principios básicos

 ?? EUROPA PRESS ?? Fernández Mañueco, ayer tras la toma de posesión con Ayuso y Gamarra
EUROPA PRESS Fernández Mañueco, ayer tras la toma de posesión con Ayuso y Gamarra

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain