Belarra desconfía del PSOE y lo señala por «no limpiar las cloacas»
► Podemos no fue informado del espionaje a Sánchez y piden a Robles su dimisión
Es cada vez más habitual que Unidas Podemos se entere de asuntos trascendentales a la vez que la prensa y los ciudadanos. Es algo que molesta sobremanera a los morados, al entender que deberían ser partícipes o conocedores de todo aquello que afecta a la gobernabilidad, así como a las políticas y decisiones de Estado. Pero esta vez, tras conocer que el presidente del Gobierno y la ministra de Defensa habían sido espiados por boca del ministro de Presidencia y por televisión, el enfado ha sido mayúsculo.
Así se traslada desde la sede morada donde se subraya que la líder de Unidas Podemos, Yolanda Díaz, había sido informada minutos antes, y que la secretaria general –a quien entienden que debería haberse canalizado la información–ni siquiera recibió una llamada por parte de Moncloa. En esta ocasión, Podemos no quiere dejar pasar este nuevo revés, al entender que sus principales líderes políticos también han podido ser espiados, al relacionar directamente el asunto de las escuchas con las «cloacas del Estado». La propia ministra Ione Belarra no descartó este escenario al reconocer que los ministros morados no habían sido sometidos a ninguna investigación, por lo que no descartó «ningún escenario» y que «hayan podido ser víctimas» del caso de espionaje.
En Podemos, además, no dan credibilidad a la tesis que expuso Moncloa de que el espionaje sea «externo», sino que dependa directamente de «las cloacas del Estado», algo que también se defiende entre los socios de investidura. Achacan, de hecho, la responsabilidad a su socio de Gobierno por no «limpiar las cloacas», según se traslada desde algunos sectores del partido, a pesar de que este ha sido el objetivo prioritario de los morados a modo de denuncia desde que entraron en Moncloa. Así, en un señalamiento directo al Gobierno, denuncian que se trata de un «fallo inasumible», en palabras de la ministra Ione Belarra, quien fue la primera en sembrar las dudas sobre la versión ofrecida por Moncloa ayer. «Venga de donde venga, el fallo e sin as umib le. Esim prescindible depurar responsabilidades. Está en juego nuestra democracia y la confianza de la ciudadanía», reaccionó, en comunión con la vicepresidenta Yolanda Díaz quien vio «vital» que la investigación que ahora abre el Gobierno «vaya hasta el final» y con la que espera que «se depuren de manera ágil y efectiva responsabilidades ». Ambas ven prioritario que el Ejecutivo «garantice la seguridad».
Aparte de las quejas, los morados van más allá en sus reclamaciones. Como en días anteriores, ponen el foco en la actuación de la ministra de Defensa, Margarita Robles. Sin nombrarla, Belarra pidió su dimisión. «Es evidente que lo que está pasando es gr avísimoy he sido muy clara, se trata de un fallo de seguridad, un fallo de seguridad, y debe conllevar una asunción de responsabilidades, más clara no puedo ser». Más explícito fue el exlíder de Podemos, Pablo Iglesias que consideró como «insostenible» la situación de los ministros de Defensa e Interior, Margarita Robles y Fernando Grande-Marlaska.
Durante la jornada, las fuentes consultadas prefirieron no dar más detalles sobre las conversaciones con Moncloa, aunque se confesaron «más tranquilas».