La justicia ordena al Govern aplicar el 25% de castellano en 15 días
► EL TSJC da hasta el 30 de mayo para ejecutar el fallo y pide a la Inspección Educativa que lo verifique
Cuenta atrás para el fin de la inmersión lingüística en Cataluña que margina el castellano en las aulas. El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha ordenado a la Conselleria de Educación que ejecute en un máximo de 15 días hábiles –hasta el 30 de mayo– la sentencia que obliga a impartir al menos un 25% de horas lectivas en español. Es decir, una asignatura troncal más en español que la propia de lengua en todas las escuelas.
El TSJC requiere directamente al conseller de Educación, Josep Gonzàlez-Cambray (Esquerra), para que «dicte las instrucciones y establezca garantías de control» con el fin de que todos los alumnos del sistema educativo catalán reciban al menos el 25% de horas de clase en castellano en un máximo de dos semanas. La Generalitat, por su parte, anunció ayer mismo que recurrirá y el propio Cambray se puso en el centro de la diana al calificar la ejecución del bilingüismo de «aberrante» y pedir a los centros que no cambien sus proyectos lingüísticos. De hecho, la orden judicial recae sobre el republicano, por lo que en caso de in1.643 cumplimiento podría incurrir en un delito de desobediencia.
En un auto, la sección 5ª de la sala contencioso-administrativo, el alto tribunal catalán da este ultimátum a la Generalitat para que todos los alumnos «reciban de manera efectiva e inmediata» la educación mediante la utilización vehicular «normal» de las dos lenguas oficiales en los porcentajes que se determinen, que «no pueden ser inferiores al 25% en uno y otro caso».
Además de apuntar hacia Cambray y hacia la conselleria de Educación del Govern, el TSJC insta a la Alta Inspección Educativa –dependiente del Gobierno– «a efectos de verificar el cumplimiento de la parte dispositiva de la sentencia dictada en estas actuaciones en el conjunto del sistema educativo de Cataluña, informando al tribunal de la actividad desplegada y de la situación constatada a la finalización del plazo de ejecución señalado». Es decir, a controlar y velar por su cumplimiento.
El tribunal ha tomado esta decisión tras la petición que hizo la Asamblea por una Escuela Bilingüe (AEB) para forzar la ejecución de la sentencia que tumba el bilingüismo. De hecho, la entidad de referencia presentó una demanda ante la Justicia con el apoyo de familias con alumnos a través de la plataforma Escuela de Todos, solicitud aceptada por la justicia al reconocer su legitimidad para pedir la ejecución forzosa de la sentencia.
El ultimátum de la justicia, que fija un horizonte claro para empezar a aplicar el 25% de castellano, llega después de que el propio Gobierno se pusiera de perfil y rechazara pedir la ejecución del 25% de castellano en su escrito de alegaciones ante el TSJC.Y lo hizo escudándose en la reforma de la ley de Política Lingüística, el plan de ERC para esquivar la sentencia que sigue encallado en el Parlament, sin fecha para su aprobación debido a las eternas discrepancias dentro del independentismo y a las críticas de Junts.
La AEB, por su parte, calificó de «histórica» la decisión judicial –«se abre una nueva etapa, es el fin de la escuela monolingüe»– y avisa que estará vigilante con su cumplimiento, con el conseller Cambray y el Govern de Aragonès en el punto de mira.
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