«Dimisión o destitución»
► Miguel Ángel Galán pide la marcha de Rubiales después de la investigación abierta por Anticorrupción
Los audios y documentos publicados del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, ya están en manos de la Fiscalía Anticorrupción. El Ministerio Público ha decidido iniciar una investigación, según confirman fuentes del mismo, para esclarecer si ha habido irregularidades en la gestión de Rubiales al frente de la entidad y si fue legal el contrato que se firmó con Arabia Saudí para que la Supercopa de España se disputara allí. La denuncia llegó hace un mes por parte del presidente del Centro Nacional de Formación de Entrenadores de Fútbol (CENAFE), Miguel Ángel Galán.
El pasado 19 de abril llegó el primero de los escritos de Galán a Anticorrupción apuntando a delitos de cohecho, corrupción en los negocios y entre particulares, administración desleal y prevaricación administrativa. Lo presentó a consecuencia de las informaciones que «El Confidencial» ha estado publicando, entre ellas la comisión de 40 millones de euros para Kosmos Global Holding S.L., la empresa de Piqué, por el traslado de la Supercopa a Arabia. El denunciante amplió sus escritos creyendo que Luis Rubiales pudo cometer delitos de corrupción al alquilar a cargo de la RFEF una vivienda en Madrid, adquiriendo una ayuda que no le correspondía por ser ya residente en Madrid.
Galán expone que el código ético de la Federación obliga a los directivos a actuar en todo momento con transparencia. «Si la Fiscalía no abre como mínimo una investigación, aunque no se dirija inicialmente contra personas físicas o jurídicas, como ha hecho con el caso del hermano de la presidenta Ayuso, sería mandar un mensaje a la sociedad de ‘‘barra libre’’ para todos los presidentes de federaciones deportivas de España», señalaba el escrito.
El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), José Manuel Franco, ha solicitado a través de una carta al presidente de la Real Federación Española de Fútbol que aporte los datos que tenga «para mitigar la inquietud» que se ha generado tras la últimas informaciones sobre su persona y que pueden «perjudicar la imagen y el buen nombre» del organismo federativo. «Estimado presidente, la reiterada publicación de informaciones periodísticas que apuntan a presuntos comportamientos irregulares en tu actuación como presidente de la RFEF puede perjudicar la imagen y el buen nombre de la Federación», señala la carta de Franco a Rubiales.
Una acción que Miguel Ángel Galán considera insuficiente. «Ahora José Manuel Franco tiene que coger mi denuncia y pasarla al TAD (Tribunal de Arbitraje deportivo) y que el TAD lo destituya como hizo con Villar. Lo que no puede hacer es estar mirando para otro lado y mandar una carta pidiendo pidiendo a Rubiales transparencia. No tiene que mandar cartas, tiene que abrir un expediente disciplinario, que para eso hay una denuncia puesta por mí, por Dux Internacional y por la Afe», explica a La Razón. «Yo era el único en España que pensaba que podía haber delito porque la organización de la Supercopa es una función pública delegada. Todo el mundo decía que esto se quedaba únicamente en el plano ético y moral. La Fiscalía ha encontrado indicios y ha abierto una investigación, siempre respetando la presunción de inocencia de los denunciados», añade Galán.
«A Villar lo denuncié por incumplir el deber de neutralidad y lo destituyeron, aunque luego lo metieron en la cárcel por otra cosa. Están quedando el CSD y el deporte español a la altura del betún», asegura Galán, que sólo ve dos soluciones a este caso: «Que acabe con la destitución de Rubiales como pasó con Villar o con la dimisión de Rubiales».
La Federación ha desmentido todas las informaciones publicadas por «El Confidencial» y se ha puesto a disposición de Anticorrupción «para facilitar la documentación que precise o aclarar cualquier aspecto que se le solicite», dice en un comunicado.