Puigdemont deja Junts, un partido sin rumbo estratégico
Junts oficializa este sábado el fin de una etapa, con Carles Puigdemont abandonando la primera línea del partido y cediendo el testigo al tándem formado por Laura Borràs y Jordi Turull. La presidenta del Parlament y el exdirigente vinculado siempre a la histórica posconvergencia tendrán por delante numerosos retos, entre ellos las elecciones municipales del año que viene o definir el rumbo estratégico de un partido empeñado en luchar contra ERC, a quien define como su principal «rival», como así aseguró el secretario general saliente, Jordi Sànchez, la semana pasada. El congreso se celebrará en el sur de Francia.
El pasado 10 de mayo, Laura Borràs y Jordi Turull llegaron a un acuerdo «in extremis» para repartirse el poder y evitar un congreso de confrontación entre las dos almas del partido, un escenario que hubiera tensado al máximo las costuras de una formación imberbe, que apenas .
Borràs asumirá la presidencia de JxCat, hasta ahora en manos de Puigdemont, si bien se reformarán los estatutos para darle más poder ejecutivo, mientras que Turull será el secretario general en lugar de Jordi Sànchez, aunque el exconseller pretendía en un primer momento dejar a Laura Borràs funciones más representativas.
En la nueva ejecutiva de los posconvergentes, los perfiles afines a Borràs ocuparán posiciones clave: dos de las cuatro vicepresidencias serán para Francesc de Dalmases y Aurora Madaula, personas de su máxima confianza. También sitúa a un dirifente cercano en la secretaría de organización, puesto esencial para el control del aparato, que pasará a manos de David Torrents, hombre fuerte de Junts en el Ayuntamiento de Badalona.