Así es el comunismo de los cien millones de muertos
► Díaz Villanueva muestra la realidad de las purgas del comunismo y cómo Lenin y Stalin crearon ese terrible sistema estatal de crímenes
¿Es posible hacer una historia del comunismo sin referirse a sus crímenes? Sí, mintiendo u ocultando la verdad, porque esa ideología es inseparable de la liquidación física del adversario. Contrasta, sin embargo, la simpatía con la que sigue contando entre diversas generaciones que, al tiempo, hablan de la paz y los derechos humanos. Los comunistas no solo han sido criminales con los demás, sino entre ellos mismos. Nadie purga mejor sus filas, con tanta sangre y espectáculo ejemplarizante. Por eso es importante el libro de Díaz Villanueva, uno de los liberales más interesantes del siglo XXI. Ha reunido 35 episodios impactantes y bien contados, nacionales y foráneos, que reflejan cómo es el comunismo de los cien millones de muertos.
Pero no todos los comunistas son criminales, dice Díaz Villanueva, sino aquellos que siguen los dictados marxistas-leninistas. Cierto. Aunque cuánto silencio cómplice hay alrededor de los asesinos y su ideología. El libro se inicia con las tristes Checas, pasa por las fosas de Madrid, el genocidio de Katyn, el aplastamiento de los rebeldes húngaros húngaros y checos, los gulags, Ceaucescu, y acaba con la Venezuela de Chávez. El epílogo se dedica a deshacer el mito del Lenin bueno y el Stalin malo. Len in fue quien orquestó el sistema de represión y liquidaciónsocial, el criminal cruel, y Stalin, su discípulo. Fue Lenin, dice, el diseñador de la «mayor máquina de picar carne que ha conocido la especie humana en toda la Historia».
Lo mejor ▲
la sinceridad que el autor emplea para mostrar la realidad del comunismo
Lo peor ▼
Nada importante, se trata de un libro necesario y muy completo para entender esta ideología