Detenidos por obligar a mendigar en semiesclavitud
► Un hombre y una mujer obligaban a extranjeros a pedir dinero en muy malas condiciones
Agentes de los Mossos d’Esquadra de la División de Investigación Criminal de la Región Policial Metropolitana de Barcelona (DIC), conjuntamente con la Unidad de Investigación de la Guardia Urbana de la ciudad, arrestaron a un hombre y una mujer como presuntos autores de un delito de tráfico de seres humanos con el fin de explotar a las víctimas y obligarlas a practicar la mendicidad.
El operativo policial, que se llevó a cabo el pasado 7 de junio, ha permitido que los grupos de Tráfico de Seres Humanos de los Mossos d’Esquadra y de la Unidad de Investigación de la Guardia Urbana liberaran a dos víctimas que vivían sometidas a unas condiciones infrahumanas.
En un primer momento las trasladaron al Centro de Urgencia y Emergencias Sociales de Barcelona (CUESB), donde se les proporcionó una primera asistencia, y actualmente se encuentran bajo la ayuda especializada que se activa en los casos de tráfico de seres humanos. La investigación ha priorizado en todo momento la atención a ambas personas, que vivían en una situación deplorable además de ser explotadas durante todo el día para recaudar dinero en las calles de la ciudad.
Los investigadores calculan que a diario alcanzaban una media de entre 100. Los agentes iniciaron la investigación en el mes de noviembre del año pasado cuando se detectaron dos hombres que a diario pedían limosna en el distrito de Sants-Montjuïc de Barcelona, por lo que hicieron diferentes vigilancias para esclarecer los hechos y comprobar si detrás de ellos había otras personas que los controlaban, les vigilaban y les obligaban a practicar la mendicidad. Los líderes del clan eran un hombre y una mujer que se encargaban de trasladar a las víctimas, en algunos casos al maletero de su vehículo, hasta el punto determinado donde debían mendigar. Las descargaban y las obligaban a pedir dinero durante toda una jornada, hasta que volvían a recogerlas.
El modus operandi del clan consistía, en primer lugar, en buscar personas en su país de origen con una situación de vulnerabilidad y necesidades económicas severas. Si podían, priorizaban a las personas con discapacidades físicas, principalmente por dos motivos: por un lado, las personas con discapacidades son susceptibles de recibir más dinero a la hora de mendigar, y por el otro, esta discapacidad les hacía más difícil introducirlo en el mercado laboral tanto en su país de origen, como en Cataluña.
Una vez encontradas, las coaccionaban coaccionaban y amenazaban con viajar a Cataluña, a menudo con promesas que no se cumplían cuando llegaban y eran obligadas a practicar la mendicidad. Finalmente, los líderes del clan llevaban a las víctimas en autobús hasta llegar al lugar donde estaban explotadas. Una vez en Barcelona, las hacían estar en distintos puntos de la ciudad aprovechando los semáforos en rojo para pedir dinero entre los coches que estaban parados.
Una vez encontradas las víctimas, las coaccionaban y amenazaban para viajar a Cataluña