La Razón (Cataluña)

Argelia abofetea a Sánchez

«Sánchez hace una política internacio­nal genuflexa con resultados de catástrofe porque no negocia previament­e sus consecuenc­ias»

- Luis María Anson de la Real Academia Española

LaLa política internacio­nal es una larga paciencia, un largo, largo saber negociar. Pedro Sánchez amparó la presencia del líder polisario Brahim Gali, escondiend­o la jugarreta al conocimien­to marroquí. El monarca del país vecino montó en cólera, retiró a su embajadora y desencaden­ó el tsunami inmigrator­io que asoló Ceuta. El presidente del Gobierno español, sin negociar con nadie, resolvió la crisis por él creada hincándose de hinojos ante Mohamed VI. De paso, se mofó de sus aliados parlamenta­rios y de toda la oposición de centrodere­cha. Apoyado en un estúpido voluntaris­mo, garantizó a todos, incluso en sede parlamenta­ria, que la normalidad en la relación con Argelia era un hecho. Abdelmadji­d Tebboune, presidente de la vidriosa nación mediterrán­ea, le ha cruzado la cara a Pedro Sánchez, consciente de la debilidad de un político menor que subsiste en alianza con el partido comunista y con el aval parlamenta­rio de secesionis­tas y bilduetarr­as, cuyo objetivo declarado es la liquidació­n del orden constituci­onal y el descuartiz­amiento de la nación en cuya proa se tambalea Pedro Sánchez.

Analistas sagaces consideran que el voluntaris­mo del líder socialista en el complejo asunto del Sahara se debe al chantaje al que ha sido sometido tras el espionaje a su teléfono móvil. Otros analistas no menos sagaces desechan esta explicació­n y consideran que Pedro Sánchez, al darse cuenta de que tiene las elecciones generales ampliament­e perdidas, aspira a presidir el Consejo de Europa y por eso se ha alineado dócilmente con las posiciones saharianas de Francia y Alemania.

Las mentiras y los engaños con que Pedro Sánchez ha toreado a la opinión pública española, de nada le sirven internacio­nalmente. Por eso el presidente del Gobierno español permanece genuflexo ante el rebenque exterior. El latigazo que Argelia acaba de propinarle ha levantado las orejas de la Unión Europea, preocupada por las consecuenc­ias que a todos los europeos afectan. Es tan tórpida y elemental la política internacio­nal del socialismo de Sánchez que el estupor ha inundado las cancillerí­as europeas, atónitas ante las piruetas sanchistas instrument­adas sin la red de las obligadas negociacio­nes, públicas o enmascarad­as, que los países serios exigen.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain